La ciudad ha sido testigo de un emocionante descubrimiento arqueológico que ha dejado al descubierto parte de su rica historia. Durante las obras de repavimentación y mejora de servicios en la calle Ruiz Tagle, la teniente de alcalde delegada de Cultura y Patrimonio Histórico, Pilar Pintor, ha anunciado el hallazgo de un horno de alfarero que formaba parte de un taller inédito hasta ahora.
Este significativo descubrimiento arqueológico ha sorprendido a los expertos y a la comunidad, ya que se trata de un taller dedicado a la producción de objetos de cerámica, incluyendo los llamados “ataifores”, que eran fuentes utilizadas para servir alimentos en la época andalusí.
La aparición del horno de alfarero a pocos centímetros del suelo ha desatado la emoción entre los arqueólogos y amantes de la historia, ya que ofrece una ventana fascinante a la vida y el arte de la antigua Algeciras. Se espera que, a medida que se realice un estudio más detallado del material recuperado durante la intervención, se pueda conocer más sobre los objetos fabricados en este taller y la función que desempeñaban en la sociedad de esa época.
Según los primeros indicios, el horno de alfarero habría sido abandonado en algún momento entre finales del siglo XIII y mediados del siglo XIV. Este abandono pudo haber sido el resultado de cambios en la economía o en la demanda de los productos cerámicos de la época
El hallazgo también ha revelado un hornillo portátil, que probablemente se utilizaba para actividades específicas relacionadas con la producción de cerámica. Estos detalles proporcionan pistas valiosas para comprender mejor cómo se llevaba a cabo la elaboración de objetos de alfarería en el pasado y cómo era la vida cotidiana en la antigua Algeciras.
La preservación de este patrimonio arqueológico es de suma importancia para la ciudad, y se espera que se tomen las medidas necesarias para proteger y estudiar cuidadosamente estos valiosos vestigios del pasado. El ayuntamiento y los expertos en arqueología trabajarán conjuntamente para garantizar que el horno de alfarero y los objetos encontrados sean documentados, preservados y, en la medida de lo posible, accesibles al público en el futuro.
Este emocionante hallazgo subraya la importancia de llevar a cabo estudios arqueológicos exhaustivos antes de realizar cualquier intervención en áreas históricas de la ciudad. La calle Ruiz Tagle ha revelado una nueva faceta de su pasado, y este descubrimiento nos recuerda la riqueza y diversidad cultural que atesora Algeciras, una ciudad con una herencia milenaria que merece ser cuidada y valorada para las generaciones futuras.