Los Ayuntamientos de Algeciras y Los Barrios tendrán que aumentar la vigilancia del área de un kilómetro y medio al oeste de sus términos municipales en las que se ha detectado el virus de la fiebre del Nilo Occidental (VFNO) en un grupo de mosquitos para evitar que críen. Esta medida les llevará a fumigar en puntos concretos en los que se detecte un aumento de las hembras adultas o las larvas, al margen de que en los próximos días, el Servicio de Salud Ambiental aumente el nivel de riesgo de los dos municipios.
El Instituto de Salud Carlos III, referencia nacional e internacional en investigación biomédica y salud pública en España, se encuentra analizando los datos recopilados por la Junta para confirmarlos, pero entre tanto ya se ha activado el protocolo previsto en el caso de que se comprobara la circulación del virus, como ha ocurrido en la comarca.
Carolina Sánchez
, coordinadora del Programa de Vigilancia y Control integral de vectores transmisores del Fiebre del Nilo occidental en Andalucía, ha pedido “precaución” sin “alarma” frente a este positivo, registrado en un papel de 50 ejemplares hembras del mosquito Culex perexiguus, una especie africana que tiene su hábitat en entornos rurales.
El positivo ha sido comunicado Servicio de Vigilancia Humana de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica y a Sanidad Animal.
Las estaciones de trampeo que gestiona la Junta son 26. Una de ellas está en Tarifa. En ninguna se ha detectado el virus del Nilo. Además, la Estación Biológica de Doñana tenía ya siete fijas a las que ha añadido este año 400 dentro del programa Arboprevent. En una de estas sí se ha localizado. Todas ellas forman parte de una red de vigilancia entomológica que incluye otras 23 estaciones de la Diputación de Huelva, dos de la Consejería de Agricultura y algunos ayuntamientos, como el caso de Los Barrios.
“Lo primero que hacemos es calcular la densidad poblacional. Las que nos interesan son las hembras porque son las que pican para chupar la proteína de la sangre que utilizan para sintetizar sus huevos. Entre los ejemplares que caen en las trampas se identifican las distintas especies porque no todas son potencialmente transmisoras. Se separan, se cuentan y luego se hacen grupos de 50 y a ellos se les hace la PCR para el virus del Nilo”, relata Carolina Sánchez, que afirma que ahora tienen más datos que nunca para combatir la proliferación del virus: “Cuantas más trampas, más información de cada uno de los territorios”.
La coordinadora del programa subraya que existen dos especies principales que lo transmiten en Andalucía. El Culex perexiguus africano, que vive en entornos rurales y ahí es donde se produce su ciclo de transmisión. “Cuando hay una amplificación del ciclo puede pasar al humano o a otros mamíferos como los caballos”, detalla. “Hay otro que está en entornos urbanos, que es el Culex Pipiens. Cuando hay muchas aves infestadas y el mosquito las pica se puede producir la transmisión en zonas urbanas. No es fácil que ocurra porque depende de muchos factores, pero al identificarlo podemos trabajar para evitar un episodio de enfermedad”, añade.
Carolina Sánchez explica los pasos dados por la Junta tras recibir la información de la Estación Biológica Doñana: “Lo primero es hacer un mapa con la ubicación de la trampa en el centro y una circunferencia de un kilómetro y medio alrededor. Es necesario para saber si hay núcleos poblacionales afectados y a qué municipios afecta. Dependiendo de la distancia a las zonas habitadas puede hacer que el nivel de riesgo aumente. Después se establecen las medidas de salud pública preceptivas”.
“A través de la Delegación Territorial de Salud nos dirigimos a las administraciones locales, porque ellos son las competentes en adoptar las medidas de control. Les damos los datos de la muestra, el mapa con el área de protección y el nivel de riesgo”, continua.
En un “breve periodo de tiempo”, los ayuntamientos deben comenzar la vigilancia “posibles puntos favorables a convertirse en refugios de adultos y crecimientos de larvas, incluso en zonas urbanas y puntos de agua como fuentes, ríos, acuíferos”.
Estas tareas se realizan a través de un servicio del control de plagas que utilizan “productos autorizados” para fumigar. Además están obligados a comunicar la situación a la población, normalmente a través de las redes sociales, sobre todo en el caso de senderos donde se suele hacer deporte o lugares que habitualmente visitan los cazadores en los que es conveniente tomar medidas de precaución.
“Hasta ahora los mosquitos transmisores que están cayendo en las trampas son muy pocos. Lo importante es que lo hemos detectado pronto y que no partimos de cero, porque los ayuntamientos tienen sus planes y saben lo que hacer”, concluye.
Los ayuntamientos de Algeciras y Los Barrios han confirmado que reforzarán las tareas de preventivas que realizan hasta el momento. En Algeciras, durante estos días se procederá a la firma del contrato con la empresa ganadora del concurso de adjudicación del servicio de ejecución del plan de control vectorial, que incluye tratamientos biocidas contra la población de estos animales. “Algeciras trabaja desde el año 2021 en distintos frentes para prevenir la aparición de brotes del Virus del Nilo y lo hace a través de la aplicación del Plan Municipal de Vigilancia y Control Vectorial, en coordinación con las medidas adoptadas al respecto por la Junta de Andalucía”, ha informado la concejal delegada de Salud, Sabina Quiles.
Estas tareas se ejecutaron incluso cuando la ciudad se encontraba durante 2022 en situación de nivel 0, es decir, sin riesgo, pero se adoptaron de manera preventiva. Asimismo, dentro del plan municipal se encuentra enmarcado el Plan de Comunicación a la Ciudadanía, disponible en el portal web municipal, y a través del cual se facilita información sobre las medidas de prevención que cualquier persona debe tener en cuenta para evitar la posible picadura del mosquito transmisor.
Quiles hizo un llamamiento a la tranquilidad “ya que el Ayuntamiento viene trabajando para prevenir, aunque también necesitamos la colaboración de todos para evitar la proliferación de focos de cría en los ámbitos privados”.
El Ayuntamiento de Los Barrios tiene contratada a la empresa Plagasur, que realiza muestreos desde mayo de 2022 en los que no ha detectado positivo alguno.
3 respuestas
Que se elimine el mosquito del Nilo, muy bien, pero quizás si hubiera más pájaros habría menos insectos, pero con tanta fumigación no hay insectos y nos estamos quedando sin pájaros, se han dado cuenta de que tenemos un parque muy bonito y sin cantos de pájaros
Claro que en la jaula de los pájaros de cartón podemos poner grabaciones de cantos de pájaros para suplir su falta.
Vaya par de gemelos