En ese Pleno, PP y Ciutadans defenderán sus respectivas enmiendas contra un proyecto que consideran intervencionista y que otros partidos pretenden utilizar para azuzar el enfrentamiento entre Cataluña y España. El PSC, que ha dado libertad de voto a sus diputados, también presenta enmienda, pero de retorno, e intentarán disimular la división que esta ILP genera en sus filas pidiendo que la votación sea secreta.CiU también ha dado libertad de voto a sus diputados, mientras que ERC e ICV apoyan a la plataforma. De hecho, republicanos y ecosocialistas ya intentaron abolir la fiesta en la anterior legislatura con una proposición de ley que no prosperó debido a la celebración de elecciones autonómicas y a la presión de las tierras del Ebro, donde tienen su granero de votos.Los «correbous», exentosCon la ILP se pretende reformar el artículo 6 de la Ley catalana de Protección de los Animales para que se prohíban las corridas. Quedarían exentos los «correbous».La votación del próximo 15 de diciembre es importante, porque permite avanzar el resultado final de la tramitación. Si las enmiendas son rechazadas, la ILP pasaría a la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento autonómico, por donde desfilarían expertos a favor y en contra -hay rumores de que podría acudir el torero José Tomás-. Tras la discusión de las enmiendas parciales, el texto podría ser votado de nuevo en el Pleno la próxima primavera.