Según ha informado el diario Sur, la investigación policial ha comprobado que su identidad era falsa, y que en realidad responde al nombre de Milos y su nacionalidad a la montenegrina.
Sin embargo, fue como Slavisa como fue detenido en 2014 en una embarcación con 31 kilos de cocaína. Con esa identidad ha cumplido su condena en la cárcel de Botafuegos, en Algeciras, donde le tachan como un interno “modélico”, cuyo comportamiento le hizo merecedor de 19 recompensas en metálico.
Acaba de superar el tercer grado y gozaba de la libertad condicional, cuando este miércoles fue acribillado a ballazos en Marbella. La Policía investiga los hechos, que parecen coinducir a un enfrentamientos entre organizaciones criminales de la ex Yugoslavia.