El acusado, un exagente de la Guardia Civil de 50 años y fuera del servicio desde 2005, llegó a los juzgados sobre las 9,30 horas, donde se concentraban un grupo de familiares y amigos de la joven fallecida, que lo recibieron al grito de “asesino” y clamando “justicia para Natalia”.
Cabe recordar que los hechos ocurrieron en la madrugada del viernes al sábado cuando, en el transcurso de una reyerta, la joven Natalia B.G., de 20 años de edad, recibió una puñalada en el abdomen que le causó la muerte.
El presunto autor de los hechos había abandonado el cuerpo de la Guardia Civil por problemas psicológicos y era conocido en la barriada de El Rinconcillo. Los hechos han causado pesar en buena parte de la sociedad algecireña, puesto que la joven era conocida por trabajar en un bar cercano a su domicilio.