En una nota difundida en sus perfiles en las redes sociales, la Policía gibraltareña explica que es “consciente de las preocupaciones expresadas por la comunidad” derivadas de los “comentarios y vídeos publicados en las redes sociales” y de los “disturbios” que tuvieron lugar en La Línea “tras el incidente de anoche en Eastern Beach”.
El comunicado aclara que no han recibido ninguna denuncia por parte de residentes en Gibraltar o vehículos que hayan sido atacados en España, aunque recomiendan a los ciudadanos usar “el sentido común y evite áreas o situaciones que puedan dar lugar a confrontaciones”.
Del mismo modo, indican que han estado “en contacto” con sus homólogos de España desde que ocurrió un incidente que califican de “trágico” y que está “bajo investigación”, por lo que instan a no “especular sobre hechos que aún no se han determinado”.
La Policía gibraltareña entiende que el suceso ha afectado a muchas personas “de los dos lados de la frontera, a nadie más que a la familia del difunto y a los involucrados en el incidente” y expresa su pesar por el fallecimiento.
Sin embargo, confía en que “la gran mayoría” de los vecinos de los dos lados de la frontera “no compartan algunos de los sentimientos e intenciones antagónicas expresadas en las redes sociales”.
Por todo ello, aconsejan “moderación” e instan a “no caer en la trampa de participar en intercambios hostiles en las redes sociales” que “sólo sirven para aumentar aún más” esos “sentimientos” de animadversión.