Según ha explicado la Guardia Civil en una nota, los agentes del control de cabotaje, que realizaban sus labores de resguardo fiscal sobre los vehículos procedentes Tánger-Med (Marruecos), identificaron al conductor y propietario de un turismo que levantó las sospechas de los agentes, por el estado de nerviosismo y las contradicciones ante las preguntas de los actuantes.
Así, procedieron a una laboriosa inspección del vehículo, apoyados por un componente del Servicio Cinológico, se constató de la existencia de varios espacios habilitados para transportar hachís en la cabina de dicho camión.
Tras haber marcado como positivo el can detector de drogas en la zona del turismo, los agentes de la Guardia Civil procedieron a una inspección minuciosa, dando como resultado la localización en su interior de 22 envoltorios de resina de hachís que arrojaron un peso total de cuatro kilogramos y un valor en mercado de más de 6.500 euros.
El detenido, al que se le investiga por la comisión de un presunto delito contra la salud pública por tráfico de drogas, junto al atestado policial y la droga incautada, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Algeciras.