El operativo de la Guardia Civil fue diseñado en respuesta al aumento de este tipo de ilícitos en la población. Por este motivo, se aumentó la presencia policial en las zonas de mayor incidencia delictiva y se enfocaron las labores de investigación al esclarecimiento de estos hechos.
Como consecuencia de los servicios practicados se sorprendió al autor mientras se encontraba en la comisión de uno de los delitos por lo que se procedió a su detención. Según pudo determinarse durante la instrucción de las diligencias policiales, el detenido habría causado los daños a varios vehículos, que fueron finalmente peritados en más de 3.000 euros.
De los hechos se instruyeron las correspondientes diligencias, que en unión del detenido, fueron puestas a disposición de la Autoridad Judicial.