Fue el 5 de septiembre de 2007 cuando el pesquero ‘Nueva Pepita Aurora’ naufragó cuando regresaba de faenar en aguas marroquíes de Larache con una tripulación de 16 personas. En un primer momento el dispositivo de Salvamento Marítimo movilizado logró rescatar del mar a ocho supervivientes y tres cadáveres.
Pescadores de las cofradías de Cádiz y Barbate junto a tres robots contratos por Fomento se unieron a la búsqueda, llegando a recuperar otros dos cuerpos sin vida a lo largo de los días. A última hora del día 21, 16 días después del siniestro, se dio por finalizado el operativo de búsqueda con tripulantes aún desaparecidos.
Según la investigación, el barco pesquero no pudo afrontar el temporal cuando navegaba a 14 millas de Barbate, por un exceso de peso y porque tenía taponados los salideros de agua.
Por estos hechos, el patrón del pesquero fue condenado ocho años después, en 2015, a 18 meses de prisión y a indemnizar a las familias de los fallecidos con 150.000 euros para cada una de ellas, tras una sentencia de conformidad después de que todas las partes alcanzaran un acuerdo.
