La rama norteafricana de la red terrorista internacional asegura que “Al Qaeda no tiene nada que ver con el ataque en Marrakech” y niega “sin ningún género de duda” su implicación en el atentado, según la información recogida por la cadena panárabe Al Yazira, citada por el portal de noticias MediArabe.info.
AQMI asegura que los ataques “contra los judíos y los cruzados” siguen siendo una prioridad para la organización, pero especifica que se reserva el derecho “a decidir cuándo y cómo” se perpetran.
El principal sospechoso del atentado del pasado 28 de abril en la cafetería ‘Argana’, en la plaza Jamaa Lafna de Marrakech, entró al establecimiento disfrazado como un hippie para poder colocar las dos bombas sin levantar sospechas, según fuentes oficiales.
“El hombre ha sido identificado como Adel al Ozmani. Entró en el café llevando una peluca, una guitarra y dos bolsas en las que escondió los dispositivos explosivos”, ha señalado la misma fuente.
“Pidió un zumo de naranja antes de abandonar el establecimiento tras dejar tras de sí las dos bolsas. Usó un teléfono móvil para detonarlas una vez se encontraba fuera”, ha agregado. El portavoz del Ministerio del Interior no ha hecho ningún comentario al respecto hasta este momento.
El pasado jueves, el Ministerio anunció la detención de tres ciudadanos de nacionalidad marroquí en relación con el ataque, y señaló que el principal sospechoso mostró su “lealtad” a Al Qaeda.
En el atentado fallecieron 16 personas, incluidos ocho turistas franceses, y es el ataque más mortífero en Marruecos desde que doce terroristas suicidas acabaron con la vida de 33 personas en varios ataques coordinados en la ciudad de Casablanca en 2003.
Fuente: Europa Press