Tan solo hay que echar un vistazo al panorama general para darse cuenta. Los casos de cyber bullying se han disparado a medida que los teléfonos móviles con conexión a internet se ha extendido. Algo realmente grave, ya que el acoso en escuelas se acaba extendiendo a las redes y, magnificado por las redes sociales, puede ser de lo más dañino para los niños y niñas.
Por esa misma razón es muy importante saber dar un uso responsable a las nuevas tecnologías. Por eso, cuando tengas que dar el paso de comprar un smartphone a cualquiera de tus hijos, te conviene saber de antemano que existen móviles para niños. Modelos pensados para que los más pequeños de casa se vayan familiarizando con esta tecnología, aprendan a usarla y sepan sacarle partido. Pero para que, al mismo tiempo, estén protegidos de los peligros de internet y los dispositivos móviles.
Ahora bien, ¿por dónde empezar? ¿Qué funciones debe tener ese primer teléfono? Esas son cuestiones que se deben saber abordar para elegir bien. De hecho, todo el proceso de adaptación a estos dispositivos pasa por diferentes modelos y diferentes apps para que el niño poco a poco se vaya familiarizando hasta aprender a usar adecuadamante los teléfonos y, sobre todo, a hacerlo de manera responsable.
Eligiendo sus primeros teléfonos móviles
Antes de entrar en materia, aconsejamos tener a mano webs como la de smartphones-baratos.com. El motivo de esto no es otro más que tener acceso rápido a un lugar con buenas reseñas de modelos y con ofertas atractivas. Porque la información que damos aquí es esencial para empezar, pero, cuando llega el momento de lanzarse a las tiendas, la enorme cantidad de opciones que hay puede abrumar.
Aclarado esto, vamos a dividir los tipos de teléfonos en tres etapas. Primero la edad más temprana, entre los 6 y los 7 años; después, damos el paso al rango entre los 12 y 14 años y, finalmente, vemos las mejores opciones de 15 años en adelante. Esos son los rangos más adecuados para dar cada paso en esto de la familiarización y uso de dispositivos móviles.
El primero, más limitado
Cuando son más pequeños, realmente lo único que necesitan de un teléfono móvil es que les sirva para llamar o recibir llamadas, al igual que para enviar o recibir mensajes. En el rango de edad más bajo, a partir de los 6-7 años, lo único que necesitan es un móvil que no tenga apps siquiera. No hace falta nada más, porque experimentar con aplicaciones ya abre un abanico de posibilidades demasiado grande para su corta edad.
En ese sentido, hay modelos muy interesantes como el Ibold. Un terminal de unas 3 pulgadas de tamaño que está pensado para almacenar números de teléfono y comunicarse de la manera más tradicional. Nada de conexión a internet ni nada por el estilo. Trae incluso una cámara integrada y un botón SOS para hacer llamadas de emergencia. Lo esencial para que el pequeño pueda estar localizado.
Dando el siguiente paso
Una vez el pequeño ronda los 12-14 años de edad, ya puede empezar a usar algunas aplicaciones en su dispositivo. Ciertamente, ya se abren ante él todas las posibilidades del ámbito digital, aunque hay que establecer algún tipo de control parental para evitar el uso indebido. Hay que tener en cuenta que las redes sociales no suelen permitir el registro de menores de 14 años por cuestiones de seguridad.
Por eso mismo, y porque es pronto para que sean exigentes, es suficiente con modelos como el Huawei Ascend Y330, o incluso el Alcatel PIXI 4. Son buenos modelos de entrada para pequeños. Algo ideal para que se vayan familiarizando con Google, con las apps y todo lo que pueden ofrecer. De hecho, ya les permite incluso disfrutar de algún que otro juego.
El salto final
A partir de los 15 años, los jóvenes ya pueden usar los teléfonos móviles con total soltura. Con esta edad, pueden acceder a prácticamente cualquier dispositivo móvil, así que no hace falta establecer recomendaciones. Lo mínimo exigible, eso sí, es optar siempre por terminales bien ajustados en la relación calidad/precio. Ya que vas a hacer una inversión, al menos asegúrate de que sea buena.
Esperamos que hayas tomado buena nota. Teniendo muy claras las limitaciones que debe haber y, sobre todo, las edades más aconsejables, el resto es bastante más sencillo. Tu hijo o hija puede ser todo un crack usando el teléfono, pero para ello necesita tener algo que realmente se ajuste a sus verdaderas necesidades tecnológicas.