De todos estos expedientes, la gran mayoría (19) fueron solicitados por clientes de discotecas, mientras que el resto (3) se presentaron contra pubs, según los datos aportados por la OMIC. Dentro de las 19 reclamaciones contra discotecas presentadas este año, todas excepto una -relacionada con la pérdida de una prenda en el guardarropa- tuvieron que ver con el derecho de admisión.
En este caso, se trataría de la infracción de la facultad que asiste a todos los consumidores y usuarios de ser admitidos, con carácter general y en las mismas condiciones objetivas, en todos los establecimientos públicos que se dediquen a la celebración de espectáculos públicos y al desarrollo de actividades recreativas, informaban desde la OMIC. Fuentes consultadas por este diario indicaron que un sólo establecimiento acumula gran parte de las reclamaciones.
Durante todo 2008, se abrieron un total de 11 expedientes a locales de ocio, todos ellos a discotecas. Nueve fueron puestos por asuntos derivados del derecho de admisión, uno más por pérdida de prenda en guardarropa, y uno más por problemas con el personal de seguridad. Hay que tener en cuenta, no obstante, que en fechas recientes se ha incrementado el número de licencias hasta llegar a siete.
Por otra parte, la Policía Local cuenta con seis incidencias relacionadas con la negativa de los establecimientos con licencia de discoteca en Algeciras por no proporcionar la hoja de quejas y reclamaciones a los usuarios en los meses de septiembre y octubre. Según los datos a los que ha podido tener acceso este diario, dos de las discotecas de la ciudad acumulan la gran mayoría de las incidencias. Una de ellas es también la que tiene más reclamaciones.
Según comentan fuentes del cuerpo municipal, en la mayoría de casos a la llegada de los agentes el cliente ya está rellenando la hoja y el problema no va a más. Sin embargo, las fuentes indicaron que, al menos en un caso, se llegó al extremo de que se produjesen insultos y amenazas.
De igual modo, la Policía Local recoge otras cinco incidencias similares en un centro comercial, un bar, un hostal y una empresa de gas.
El Decreto 10/2003 de 28 de enero aprobado por la Junta de Andalucía proscribe la posibilidad de establecer condiciones basadas en arbitrarios criterios de nacionalidad, racistas o sexistas, así como en cualquier otra condición dirigida a seleccionar clientelas en función de subjetivas apreciaciones sobre la apariencia física de las personas. Ello podría dar lugar, incluso, a la prohibición de su actividad.
De hecho, caso de prosperar una reclamación, ello supone que se imponga una multa de carácter económico. El capítulo II del citado reglamento recoge con carácter general obligaciones del empresario de no dejar entrar a clientes por cuestiones de aforo, minoría de edad, manifieste actividades violentas -no por haberlas manifestado en el pasado, es decir, haber provocado un altercado antes-, etc.
Los locales cuentan con la posibilidad de solicitar condiciones específicas de admisión previa solicitud al Ayuntamiento. En el caso de Algeciras, de los siete establecimientos con licencia de discoteca, sólo uno solicitó esta distinción y se le concedió.