Lo que se intuía hará un año y todos desmentían acaba de suceder, la importante empresa textil ZARA, cierra sus puertas en la calle principal más céntrica de la ciudad, calle Regino Martínez Basso, o también conocida como “Calle Ancha”.
Esto nos lleva a plantearnos, ¿qué sucederá con el centro de Algeciras? Un centro que en su día estaba compuesto por un conjunto de calles con numerosos locales comerciales y hosteleros, como la famosa “Calle Tarifa”, “Calle Río”, “Calle Prim” o “Calle Muñoz Cobos” entre otras; que poco a poco han ido desapareciendo y con ellas la vida, haciéndolas a penas intransitables a ciertas horas de la tarde. Además de la implantación irracional del centro comercial Puerta Europa (modelo comercial importado de Estados Unidos para dar solución a una ciudad dispersa), dando lugar a la desbandada de tiendas y franquicias del centro hacia la gran superficie por diversos motivos: novedad, alquileres más baratos, o sensación de seguridad, comodidad y confort.
El conjunto de estos motivos, suman lo que hoy estamos viviendo, un casco histórico abandonado, perdiendo su condición de centro comercial abierto para ser únicamente un casco histórico cada vez con menos historia (debido a la poca atención que se ha dedicado a la conservación del patrimonio).
Un informe de la UNESCO Global Report Culture: Urban Future, del 18 de octubre de 2016, durante la conferencia de Habitat III en Quito, asegura que las ciudades del mundo “pueden ser más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles cuando se sitúa la cultura en el corazón de la planificación urbana”. Quiere decir que, ¿el Ayuntamiento está olvidando cuán importante es mantener el bombeo de un corazón? ¿y los ciudadanos estamos de acuerdo con ello?
