Redacción TCAM/ M.J.R
La Hora del Planeta comenzó a realizarse en Sídney, en 2007, y nació como un evento internacional promocionado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) que se celebra el último sábado de marzo de cada año y que consiste en un apagón voluntario durante una hora. Con la iniciativa, se pretende concienciar a la sociedad sobre la necesidad de adoptar medidas frente al cambio climático y las emisiones contaminantes, así como ahorrar energía, y aminorar la contaminación lumínica.
En 2011, más de 5.000 ciudades de 135 países apagaron las luces de sus principales monumentos y edificios emblemáticos, enviando así un claro mensaje: los gestos simbólicos pueden generar grandes cambios si conseguimos un compromiso global durante todo el año.
Ir “más allá de la Hora” fue el lema de esa última edición. La campaña tomó entonces una nueva dimensión invitando a los ciudadanos a ir más allá y adoptar medidas de ahorro energético durante todo el año. Fue el año de los pequeños y grandes compromisos para crear un modelo de vida más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
En 2012, WWF quiere desafiar al mundo. “Es el año de los compromisos y los retos. De las acciones a favor del medio ambiente durante todo el año. WWF te invita a retar a tus amigos, familiares, empleados y clientes: ¿Qué serías capaz de hacer para salvar el planeta?”, así invitan a los usuarios desde la web de La hora del planeta a que difundir su campaña por las redes sociales. “Cuantos más seamos, más fuerte se oirá nuestra voz.”
Compromiso medioambiental
CajaGRANADA-BMN secunda así, la mayor campaña de movilización global para concienciar de la importancia de la lucha contra el cambio climático, auspiciada por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). Sus sedes centrales apagará las luces en Madrid, Vilafranca del Penedès, Palma de Mallorca y Murcia, como muestra de su política de responsabilidad social del grupo BMN, impulsada por Antonio Jara, vicepresidente segundo de la entidad y presidente de CajaGRANADA.
El Grupo BMN es consciente de los impactos que sus actividades generan en el medio ambiente, por lo que, fruto de su política de responsabilidad empresarial, desarrolla compromisos formales tendentes a su minimización, y procura disminuir su impacto ambiental directo, optimizando el uso de la energía y los recursos naturales en sus oficinas y Servicios Centrales.