Tanto el alcalde como el concejal de Pesca muestran su disconformidad con la que consideran una drástica medida que viene a mermar, aún más, la difícil situación en la que se encuentra flota artesanal algecireña. Tomás Herrera se pronuncia en defensa de los 20 barcos que conforman el sector pesquero en la ciudad y que aglutina alrededor de 200 puestos de trabajo: Todos ellos se verán afectados, en mayor o menor medida, porque basan su actividad en la pesca del atún durante la campaña de capturas que tiene lugar entre los meses de agosto y enero. El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores, Francisco Soler, ha explicado que con este tipo de decisiones el futuro cada vez se hace más oscuro para los pescadores: Si la cuota de pesca permitida ya era corta este año, al reducirse en más de un 40 por ciento estamos abocados a la desaparición. Soler ha hecho hincapié en que la decisión de la ICCAT es injustificada, ya que la captura del atún rojo la realizan pescadores artesanales utilizando una técnica de pesca muy selectiva.