Picardo lo mismo está un día en Bruselas que al siguiente en Washington siempre con España entre ceja y ceja, alardeando de lo que no es, y haciendo bueno el refrán:”dime de qué presumes y te diré de que careces”.
La penúltima de Picardo, ya que va seguir erre con erre ha tenido como escenario Washington, donde hace un par de días, Fabían Picardo ha presumido de ser el líder internacional en la lucha contra el blanqueo de capitales, lo que es mucho presumir, ya que Picardo ha afirmad que: “Desde 1994, Gibraltar ha ocupado una posición de liderazgo en la lucha internacional contra el blanqueo de capitales y la prevención del uso del sistema financiero para blanquear los beneficios obtenidos mediante el tráfico de drogas o cualquier otra actividad ilícita”. La cruz de Picardo y hasta la demostración de que “se coge antes un mentiroso que un cojo”, es que estas declaraciones del Ministro Principal de Gibraltar se producen mientras que la Comisión Europea está dispuesta desde hace unos meses a escudriñar a fondo el sistema fiscal de Gibraltar.
La Comisaría de Competencia, dirigida por el español Joaquín Almunia, inició en verano una inspección, por ahora de carácter informal, sobre la aplicación de las normas fiscales que ejercen las autoridades del Peñón. Como ya ocurrió recientemente, por ejemplo, con Holanda, Luxemburgo e Irlanda, los servicios de Competencia europeos han enviado a las autoridades británicas un cuestionario para que expliquen si Gibraltar ha llegado a acuerdos bilaterales con empresas para favorecer su tributación
Discurso del Ministro Principal de Gibraltar, Fabián Picardo, ante la Heritage Foundation de Washington Damas y caballeros, buenos días, y gracias por la oportunidad que me brindan de dirigirme a tan prestigiosa institución esta mañana. Es un verdadero honor para mí estar aquí y permítanme que les diga que los últimos acontecimientos ocurridos en el Mediterráneo oriental, que se han producido después de programar este discurso, hacen que esta oportunidad sea aún más oportuna por los motivos que espero poder explicar más adelante. Primer contacto con la Heritage Foundation Antes de empezar con la cuestión de por qué el pequeño peñón de Gibraltar podría tener alguna relevancia para un gigante como EE.UU., déjenme repasar por un momento las razones que me han traído a la Heritage Foundation. La verdad es que Gibraltar suele protagonizar titulares en las noticias, y lo hacemos, sin lugar a dudas, por la disputa histórica de España con el Reino Unido sobre la soberanía de Gibraltar. El año pasado no fue una excepción: en julio, Gibraltar construyó un arrecife artificial en Aguas Territoriales Británicas, frente a las costas del Peñón. Más adelante les hablaré de las Aguas Territoriales Británicas de Gibraltar, pero el aspecto relevante que quiero abordar es el siguiente: el Gobierno de Gibraltar realizó un seguimiento de las diferentes noticias en la prensa internacional sobre la situación de las Aguas Territoriales Británicas de Gibraltar y las represalias de España y tuvimos conocimiento de unas declaraciones espontáneas de apoyo sin reservas en un artículo publicado en el influyente Huffington Post el 8 de agosto de 2013. Era un artículo que revelaba a un autor que conocía y comprendía la situación de Gibraltar con un grado de detalle que no concordaba con el nivel de conocimiento y comprensión que generalmente se puede observar en EE.UU. sobre el peñón que nosotros llamamos hogar. El artículo estaba firmado por un caballero llamado Luke Coffey[1] y le siguió otro artículo igual de perspicaz en el blog de Nile Gardiner[2] en el Daily Telegraph. La cara del segundo me resultaba vagamente familiar. Bueno, como sabrán, estas dos personas se encuentran entre las distinguidas personalidades que forman esta institución. Resultó que Nile Gardiner y yo coincidimos en el Oriel College de la Universidad de Oxford. Luke Coffey pasó algún tiempo en el Reino Unido trabajando para Liam Fox, ex portavoz de Defensa en la oposición en el Parlamento británico y, por lo tanto, podía entender el asunto de Gibraltar desde la perspectiva británica. Actualmente, y después de haber recibido a Luke Coffey en Gibraltar desde que nos conocimos por primera vez, me siento en la obligación de felicitarle. Como saben, desde entonces Luke Coffey ha escrito un informe en la edición de febrero de su Backgrounder titulado ‘Self-Determination and National Security: Why the U.S. Should Back British Sovereignty over Gibraltar’ (Autodeterminación y seguridad nacional: Por qué EE.UU. debería respaldar la soberanía británica de Gibraltar)[3]. La opinión que expresa coincide exactamente con la opinión del gobierno que presido, y le estoy agradecido por ello, pero quería destacar que este informe es quizás el informe mejor documentado sobre las relaciones entre EE.UU. y Gibraltar y lo estrecho de esas relaciones. Les recomiendo su lectura a todos ustedes por su perspectiva histórica y su relevancia actual. Así pues, a raíz de percatarnos de su existencia por ese artículo, nos pusimos en contacto y comenzó una relación que me ha traído hoy hasta esta palestra: Gibraltar: ¿Dónde está y qué es? Antes de que empiece a contarles por qué el gobierno que presido cree que las cuestiones relacionadas con la soberanía británica de Gibraltar son importantes y de interés para EE.UU., me gustaría ayudar a aquellos de ustedes que tal vez no estén familiarizados con el tema de Gibraltar a refrescar sus conocimientos de geografía. ¿Dónde está Gibraltar y qué es Gibraltar? Gibraltar es una pequeña península rocosa situada en el extremo más meridional de Europa, en la puerta de acceso al Mediterráneo. Es el cruce de caminos por excelencia del mundo antiguo, donde el Mediterráneo se funde con el Atlántico. Los romanos llamaban a esta tierra Non Plus Ultra. Por lo tanto, ha sido durante mucho tiempo uno de los pasos marítimos con mayor importancia estratégica y naval, y así era ya para los romanos y los fenicios. Allí es donde estamos. En cuanto a su estatus internacional, Gibraltar es un Territorio Británico de Ultramar y un país casi completamente autónomo que figura en la lista de las Naciones Unidas de territorios sin autogobierno, a pesar de que somos totalmente autónomos en todos los aspectos menos defensa y asuntos exteriores. Hemos sido británicos desde 1704, cuando tropa británicas, junto con holandesas, tomó Gibraltar durante la Guerra de Sucesión española. En 1713 se firmó un tratado conocido como el Tratado de Utrecht o Paz de Utrecht. De eso hace exactamente 301 años. Y el pueblo de Gibraltar lleva mucho tiempo expresando su deseo de querer seguir siendo británico, a pesar de los esfuerzos españoles por recuperar el Peñón en numerosas ocasiones desde que fue conquistado y su soberanía cedida mediante un tratado. De hecho, apenas se había secado la tinta del Tratado de Utrecht cuando España ya estaba sitiando Gibraltar e incumpliendo el Tratado. Incluso en la época moderna, después de la Segunda Guerra Mundial, el general Franco reavivó la reclamación sobre nuestra soberanía y la persiguió con saña, llegando incluso a cerrar la frontera terrestre entre España y Gibraltar, separando así a familias y aislando el Peñón en un intento de estrangular nuestra economía. Sobrevivimos a este ataque con el equivalente británico del Puente Aéreo de Berlín y un apoyo enorme del Reino de Marruecos, nuestro vecino del sur, que tiene sus propias reclamaciones sobre los enclaves españoles de Ceuta y Melilla en las costas del norte de África, cuestión sobre la que no voy a opinar. Hemos celebrado dos referendos durante los últimos 50 años. En ambos, siendo el más reciente de ellos en 2002, el resultado ha sido claro e inequívoco: el 98,5% de los gibraltareños expresó su deseo de seguir siendo británicos. Sin votaciones amañadas. Sin preguntas enrevesadas. Sin manipulaciones. Cuando intenten entender hasta qué punto nos sentimos británicos, piénsenlo de esta manera: Gibraltar ya era territorio británico por tratado 64 años antes de que EE.UU. fuera independiente, y se convirtió en territorio británico mediante conquista 73 años antes de que EE.UU. fuera independiente. En este contexto, el pueblo británico de Gibraltar cree hoy día que tiene un papel importante y estratégico que desempeñar en la Europa moderna y que las grandes sinergias que existen entre Gibraltar y EE.UU. pueden explotarse para beneficio de ambas partes, habida cuenta, sobre todo, de nuestra pertenencia a la Unión Europea. Estas oportunidades comerciales existen y se suman a nuestra importancia estratégica desde el punto de vista militar para el Reino Unido y su aliado más importante, EE.UU. Los lazos históricos entre Gibraltar y EE. UU. Éste es el contexto histórico en el cual Estados Unidos y Gibraltar han tenido oportunidades de trabajar juntos en colaboración. La Relación Especial que une al Reino Unido con Estados Unidos se ve reflejada en Gibraltar como un Lazo Especial de Confianza entre nosotros. Y esta especial relación entre el Reino Unido y Estados Unidos, en concreto en aspectos relacionados con asuntos militares y nucleares, también subraya el significado y la importancia de Gibraltar para Estados Unidos, dado nuestro papel como activo militar clave para el Reino Unido. La Importancia Militar de Gibraltar para Estados Unidos La importancia de Gibraltar como base militar se deriva principalmente de su ubicación geográfica y, con el permiso de Luke Coffey, citaré su trabajo para ayudar a ilustrar la importancia de este rol a lo largo de los dos últimos siglos en los que EE. UU. ha proyectado su capacidad militar por todo el mundo. En 1904, Sir John Fisher, ex Almirante de Flota (Admiral of the Fleet) de la Royal Navy, describió Gibraltar como “una de las cinco llaves del cerrojo del mundo.” Todas las embarcaciones que entran o salen del Mediterráneo hacia y desde el Océano Atlántico deben pasar por el Estrecho de Gibraltar, y esto nos ha hecho cobrar una enorme importancia, por ejemplo durante la Guerra Fría; cuando vigilamos a la flota rusa o la detectamos por sonar en el caso de los submarinos. Gibraltar acoge una de las Bases Operativas Conjuntas Permanentes (Permanent Joint Operating Bases) del Reino Unido y actúa como importante base avanzada de operaciones para las fuerzas armadas británicas, ofreciendo un punto de abastecimiento para aeronaves y embarcaciones en su camino hacia África y Oriente Medio para el Reino Unido y sus aliados. El Puerto de Gibraltar proporciona un punto de atraque seguro para submarinos nucleares. El puerto de aguas profundas ofrece un amplio espacio para amarres seguros. El Reino Unido mantiene instalaciones de atraque tipo “Z-berth” para uso recreativo y reparaciones no nucleares en Gibraltar, lo cual le confiere una enorme importancia, tanto para el Reino Unido como para EE. UU. en este respecto. La US Navy hizo uso de Gibraltar por primera vez durante la Primera Guerra Berberisca o Guerra de Trípoli entre 1801 y 1805, cuando fue el primer puerto de escala de la US Navy y un puesto de reabastecimiento en el Mediterráneo para sus operaciones en la costa norte de África contra los estados Berberiscos. Otros casos en los que EE. UU. ha utilizado las instalaciones militares de Gibraltar son los siguientes: En 1818, durante la Segunda Guerra Berberisca o Guerra Argelina contra la Regencia de Argel, se reunió una nueva fuerza operativa en Gibraltar. En 1899, el Almirante norteamericano George Dewey hizo escala en Gibraltar para reabastecer sus barcos antes de derrotar a los españoles en la batalla de Cavite, durante la guerra hispano-estadounidense. En 1909, la Gran Flota Blanca realizó su última escala en Gibraltar para reabastecerse de carbón antes de poner rumbo a EE. UU. durante su famoso viaje de vuelta al mundo. Cada uno de los barcos requirió entre 1.200 y 1.600 toneladas de carbón para poder completar la última etapa del viaje de regreso a casa; por lo tanto la ubicación de Gibraltar en la entrada del Mar Mediterráneo ha demostrado ser extremadamente útil. No fue hasta la Primera Guerra Mundial que la utilización de Gibraltar demostró su valor estratégico para EE. UU. La Royal Navy utilizó Gibraltar como base para sus operaciones en el Mediterráneo desde el principio del conflicto. Gibraltar representó un punto de reunión clave para numerosos convoyes de los Aliados antes de cruzar el Atlántico. La US Navy y la Guardia Costera estadounidense se unieron a las fuerzas británicas en Gibraltar y realizaron operaciones conjuntas como parte del llamado Gibraltar Barrage: una escuadra naval anglo-americana cuya misión era la de evitar que los submarinos alemanes cruzasen del Mediterráneo al Atlántico tras la rendición de Austria y Turquía. Además Gibraltar fue utilizado como ubicación para efectuar reparaciones y reabastecer a los barcos de la US Navy y la Guardia Costera estadounidense durante la guerra. Pero quizás la mayor presencia de unidades americanas en Gibraltar tuvo lugar durante la Segunda Guerra Mundial. Ese conflicto resaltó la importancia de Gibraltar en la defensa de la libertad y la democracia frente al avance del fascismo Nazi a través de Europa y gran parte del mundo. El avance de la Operación Torch, que marcó el principio del contraataque de los Aliados para recuperar el norte de África, y desde ahí Europa, fue encabezado por el General Eisenhower desde Gibraltar. El gran General Eisenhower mantuvo su base operativa en el interior del Peñón de Gibraltar. El Peñón está repleto de túneles. Hay más millas de túneles en el interior del Peñón que millas de carretera en la superficie y el General Eisenhower estableció su base de operaciones precisamente en el centro del Peñón; un futuro Presidente de los Estados Unidos asentado en el mismísimo corazón del Peñón. [En este punto, permítanme que me desvíe ligeramente para comentarles que mi padre, que en paz descanse, fue miembro de la primera promoción del Real Regimiento de Gibraltar (Royal Gibraltar Regiment), establecido hace 75 años, al principio de la Segunda Guerra Mundial, y recuerdo cuando me contaba historias sobre como recogía cartas del General para entregar al Gobernador Británico.] El aeródromo de Gibraltar fue construido en esa misma época a partir de un antiguo hipódromo y aprovechando gran parte de los escombros resultantes de la excavación de los túneles en el Peñón. Durante la Segunda Guerra Mundial nuestro aeropuerto se encontraba repleto de aviones de combate y bombarderos de las Fuerzas Aliadas. El propio Eisenhower lo explicó así en su libro “Cruzada en Europa”: “No había ningún otro lugar disponible. En noviembre de 1942 los Aliados no contaban, salvo por el Fuerte de Gibraltar, con ningún espacio en todo el territorio del oeste europeo, y en la zona del Mediterráneo, nada en absoluto al oeste de Malta. Gibraltar posibilitó la invasión del noroeste de África. Sin Gibraltar, no habría sido posible establecer rápidamente la vital cobertura aérea en los campos del norte de África”. Por supuesto, la utilización de Gibraltar durante la Segunda Guerra Mundial solo fue posible porque no se encontraba bajo el control de España, puesto que España hizo creer que se mantenía neutral en el conflicto. Durante la Guerra Fría Gibraltar también fue un activo militar importante. Recuerdo que, cuando era un niño, en el colegio aprendíamos sobre la división entre Oriente y Occidente y el Muro de Berlín y veíamos los objetivos de Moscú en caso de ataque nuclear. Gibraltar era uno de ellos. De manera que los enemigos de la libertad y la democracia no subestimaban la importancia de Gibraltar. Ellos también apreciaron la importancia de Gibraltar, no solo para el Reino Unido, sino también como un importante aliado de EE. UU. Quizás, antes de pasar a la época actual, debería comentarles que se ha realizado un descubrimiento interesante y muy significativo, justo al lado del aeródromo de Gibraltar; una aeronave Liberator de la fuerza aérea estadounidense que al parecer fue derribada durante la segunda guerra mundial en las inmediaciones del Aeropuerto de Gibraltar. Se sabe que tres de estas aeronaves fueron derribadas. Una de ellas transportaba al general Sikorski, el presidente del pueblo de Polonia, que murió justo al lado de la pista de despegue de Gibraltar. Otro bombardero Liberator fue el AL516. Y el tercero que fue derribado – y parece ser que este es el que ha sido hallado recientemente por la unidad de investigación del Museo de Gibraltar – fue el bombardero Liberator AM911. El Gobierno de Gibraltar trabajará junto con el Museo para intentar sacar el bombardero Liberator AM911 del mar y presentarlo como una exposición permanente, para ilustrar como la relación entre Gibraltar y el pueblo de EE. UU. ha perdurado a lo largo de varias generaciones. Pienso que este proyecto es importante para poner de manifiesto y reforzar los lazos que unen a los pueblos de Gibraltar y EE. UU. La importancia actual del Peñón Después de la Guerra Fría, cuando empezaba a parecer que el mundo ya no se encontraba dividido entre Oriente y Occidente y comenzó a polarizarse entre Norte y Sur, Gibraltar mantuvo su importancia. Gibraltar se encuentra en el extremo Oeste del Mediterráneo y enfrente tiene el Norte de África. En un día claro, podemos ver los coches circulando por la costa del norte de África. Operación El Dorado Canyon, los ataques aéreos estadounidenses de 1986 sobre Libia; las fuerzas navales americanas que apoyaron la operación utilizaron el puerto de Gibraltar. En 1990 y 1991, aproximadamente 193 embarcaciones de la US Navy surcaron las Aguas Territoriales Británicas de Gibraltar para dar apoyo a las operaciones Tormenta del Desierto y Escudo del Desierto. Gibraltar desempeñó un papel clave, al ser utilizado por la Flota de Reserva americana de camino a Oriente Medio. Los submarinos nucleares de EE. UU. visitaron frecuentemente las instalaciones “Z-berth” de Gibraltar. La reciente intervención en Libia, en la que dos submarinos de ataque norteamericanos, el USS Florida y el USS Providence, fueron reabastecidos en Gibraltar tras lanzar sus misiles de crucero contra objetivos libios. A medida que el norte de África cobra importancia para la seguridad de los EE. UU. debido al aumento de la presencia de terroristas, Gibraltar también cobrará mayor importancia. En los tiempos modernos, Gibraltar ha seguido actuando como puesto de operaciones para la flota del Reino Unido la cual, por supuesto, sigue manteniendo una base de operaciones conjunta en Gibraltar y una base avanzada gracias al Aeropuerto de Gibraltar. Pero no solo estamos ahí para el Reino Unido. También apoyamos a sus aliados. Por lo tanto en Gibraltar también recibimos frecuentes visitas de la Flota Mediterránea de EE. UU. y en ocasiones también nos visitan las unidades nucleares americanas, como submarinos nucleares de la flota americana. Es posible que Gibraltar sea el único lugar en el que un líder político de la cuenca del Mediterráneo les diga que sus fuerzas militares son bienvenidas. Son igual de bienvenidas que las del Reino Unido; porque Gibraltar comprende la importancia de apoyar los intereses de la política exterior británica y la defensa de la democracia occidental, tal y como la conocemos. Gibraltar nunca se ha negado a una operación de activos militares estadounidenses. Es más, el Gobierno civil de Gibraltar no cuenta con esa potestad. Pero también les hemos hecho sentir muy bienvenidos cuando nos han visitado por invitación del Gobierno del Reino Unido. Gibraltar da la bienvenida a la flota naval de EE. UU. en el Mediterráneo. No existen muchos puertos en el mundo, y menos aún en la turbulenta región del Mediterráneo, que puedan decir lo mismo. Es un lugar en el que pueden encontrar una mentalidad anglosajona, que no busca una relación transaccional – somos conscientes de que no hay seguridad sin el Reino Unido y Estados Unidos, y estamos agradecidos por ello. Los aspectos jurisdiccionales tampoco deben ser subestimados: una jurisdicción anglosajona en un emplazamiento estratégico que funciona en un marco familiar, sin necesidad de realizar una gran adaptación cultural. Comprendemos la importancia estratégica de Gibraltar, incluso en el mundo moderno de hoy en día. La relación comercial Pero Gibraltar no es solo un activo militar estratégico. También es un importante centro de comercio internacional, casi podríamos decir que un centro clave de comercio internacional. Contamos con un sector de servicios financieros altamente regulado que ha sido elogiado por la OCDE y el FMI por sus estándares regulatorios. Hemos firmado un Acuerdo de Intercambio de Información Tributaria (Tax Information Exchange Agreement, TIEA) completo con EE. UU. Cumplimos por completo con toda la normativa de la Unión Europea. Gibraltar forma parte de la Unión Europea como territorio del continente europeo del cual es responsable un Estado Miembro de la Unión Europea, en concreto el Reino Unido. Por lo tanto, como jurisdicción separada del Reino Unido tenemos la obligación de trasponer todas las directivas, normas y reglamentos de la Unión Europea a la legislación de Gibraltar. Y eso es precisamente lo que hemos hecho, concediéndonos un acceso sin restricciones al mercado único de 520 millones de personas que es la UE. De hecho, Gibraltar es una de las pocas jurisdicciones europeas que puede presumir de haber traspuesto toda la normativa necesaria de la UE a su legislación. Por lo tanto, Gibraltar es una jurisdicción que cumple plenamente con sus obligaciones para con la UE. Y esa cultura del cumplimiento, que impregna todas las actividades que Gibraltar realiza con respecto a cualquier organización de la que formamos parte, nos permitió en junio del año pasado apoyar al Primer Ministro británico en su iniciativa de incluir en la agenda del G8 a aquellas jurisdicciones que no fueran transparentes o no cumplieran con sus obligaciones. Desde 1994, Gibraltar ha ocupado una posición de liderazgo en la lucha internacional contra el blanqueo de capitales y la prevención del uso del sistema financiero para blanquear los beneficios obtenidos mediante el tráfico de drogas o cualquier otra actividad ilícita. Pero no solo nos dedicamos a los servicios financieros, y no solo somos un importante activo militar del Reino Unido, y por extensión de EE. UU. Gibraltar también es la mayor jurisdicción del mundo, la jurisdicción con mayor éxito del mundo, en cuanto a la provisión de servicios de juego online. El juego online es una parte del comercio electrónico en pleno auge, y Gibraltar se encuentra a la cabeza de este sector. Muchos territorios cuentan con varios miles de casinos online registrados. Gibraltar solo tiene 26, pero son los 26 principales operadores del mundo; los 26 operadores de mejor reputación en el mundo y sujetos a la regulación más rigurosa del mundo. En el sector del juego online, cuando las personas depositan su dinero por Internet para realizar una apuesta, la relación más importante es la de la confianza entre aquellos que participan en el juego y aquellos que reembolsarán sus apuestas. Debido a que Gibraltar cuenta con una regulación tan exigente, se ha convertido en la ubicación preferente para los principales operadores del mundo. Cerca de un 60 por ciento de todo el sector de juego online de ámbito mundial se realiza a través de Gibraltar. En este contexto, cuando EE. UU. adoptó la decisión de prohibir el juego online desde cualquier estado externo según la Ley de Comunicaciones por Cable (Wire Act), solamente hubo una jurisdicción en el mundo que impuso a sus operadores el requisito de no operar en EE. UU. como condición para mantener las licencias. Esa jurisdicción fue Gibraltar. Por lo tanto, a medida que EE. UU. comienza a abrir de nuevo su mercado de juego online, creemos que Gibraltar se encuentra en una posición privilegiada para demostrar a cada estado del país que hemos respetado sus leyes y que esto demuestra el alto nivel de regulación del sector en Gibraltar. Esta regulación afecta al proceso de concesión de licencias y también a los requisitos que conllevan dichas licencias para evitar la adicción al juego, combatir el fraude en los juegos y encuentros deportivos, y asegurar que los usuarios no puedan jugar cuando se encuentren por debajo o por encima de la edad estipulada. Bajo estas circunstancias, les he expuesto como Gibraltar es un enclave importante en Europa para aquellos que desean realizar negocios en la Unión Europea. Somos una jurisdicción con un bajo nivel de impuestos. Los impuestos en Gibraltar son del 10 por ciento, en la escala de los impuestos que se aplican en Irlanda, Luxemburgo y Malta, por ejemplo. Pero somos la única jurisdicción con legislación anglosajona en el extremo sur de Europa que no aplica impuestos de valor añadido, como resultado de una derogación negociada con el Reino Unido en el momento de acceder a la Unión Europea, en 1972. De manera que si hay empresas estadounidenses que están considerando como acceder a la Unión Europea: ¿dónde van a encontrar una jurisdicción que dé una buena acogida al ejército de EE. UU., donde el inglés sea el idioma oficial del territorio, que se encuentre sujeta a los principios legales anglosajones, con un régimen de baja imposición fiscal, donde no se pague IVA y que además ofrezca un acceso completo a la Unión Europea? Solo en Gibraltar. Y a día de hoy EE. UU. impulsa en gran medida a Gibraltar. ¿Por qué digo esto? Pues porque mi vehículo oficial ya no es un Jaguar. Es un Tesla fabricado en California. Lo mejor de la ingeniería americana. Nuestro sector del juego online se cimenta sobre una red de fibra óptica instalada por la empresa Nynex de Nueva York cuando eran nuestros asociados en nuestra empresa de telefonía. Lo mejor del conocimiento técnico americano. Y nuestras instalaciones de reparación de embarcaciones, que anteriormente eran los Astilleros Navales Reales, ahora son propiedad de un fondo de inversión americano con sede en Nueva York. La ingeniería financiera americana generando un éxito de ingeniera real. De manera que a nivel humano, comercial y militar, debemos reforzar aún más los lazos que unen al pueblo americano y al pueblo británico de Gibraltar. Hagamos que la Relación Especial siga dando vida a este Lazo de Confianza Especial. Nota a redactores: Esta es una traducción realizada por la Oficina de Información de Gibraltar. Algunas palabras no se encuentran en el documento original y se han añadido para mejorar el sentido de la traducción. El texto válido es el original en inglés que sigue.