El equipazo del Don Bosco

IAM/CR  ¿Cuántos amigos tienes en la infancia que sólo te cruzas? Un saludo con sonrisa y apenas unas palabras sinceras, “a ver si coincidimos y tomamos una cañita”…El pasado sábado un grupo de éstos “pasó de decir a hacer” y se convocaron para dar tributo y celebrar las buenas noticias que tenía uno de ellos, Santillana.

Una historia de Algeciras, la historia de un equipazo….Compartir un vestuario desde la niñez es lo que tiene, formar equipo durante años, competir juntos  por el amor a un deporte crea lazos que perduran en el tiempo, que se demuestran más allá de las vidas. Éramos niños y luego adolescentes, era otra vida, hoy casi todos llevan al fútbol a sus hijos…pero esos lazos les permitieron viajar a otra edad, un privilegio, partido en el pabellón y “bocata” en lo de Manolo, los de siempre, los del Bosco…

En el whasapp aparecieron nombres de hacía 30 años, comentarios de otro tiempo, de otra vida, Leo me localizó por Facebook y allí aparecí junto a Paulete, Yiyi, Guti, Nico, Galiano,Paco Ramos, Juanma, David y otros muchos, nombres de aquellos años, de aquella vida, me encantó  desempolvar a aquel niño que ya no soy, no pude ir, la vida de hoy no me lo permitió, pero quería volver a formar parte con estas líneas para que fueran testigo dentro de otros 30 años, para dejarlas en Google…

Aquella infancia en Algeciras no conocía palabras como internet, móvil, preocupaciones o pokemon, estábamos presentes en todo lo que hacíamos,  volver a ser niño, volver a recordar sensaciones de antaño durante un recreo, no tiene precio,  para todo lo demás ya tendrás tiempo.Aquel equipo del Don Bosco, aquellas convocatorias de Don Carlos en aquel vestuario con muchos días de agua fría, botas embarradas, alegrías y conjuras, aquellos días que vivimos y guardamos como un tesoro en la memoria, han vuelto, una mañana de sábado,  una vez al año….¿tanto cuesta? 

 

Aquel equipo no fue un equipazo, es un equipazo que 30 años después no falta a una convocatoria por amor a su capitán, Santillana, un abrazo, sólo traes cosas buenas…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *