IAM/Opinión Estimados ciudadanos y estimadas ciudadanas:El pacto por arriba de la cúpula de los partidos, de los sindicatos, de la patronal y del gobierno impulsados por los poderes fácticos es lo que ha fracasado en España.
Es lo que ha conducido a este modelo que tiene su origen en los pactos de la transición. Se han encendido todas las luces rojas de alarma. Más de 6 millones de parados, 15 millones de pobres, índices de suicidios que superan los 9 diarios tres de ellos relacionados con la situación económica, desahucios de la vivienda, recorte en la salud y en la enseñanza pública, un nivel de empobrecimiento en la población desconocido en las últimas décadas en Europa, con hambre física, emigración de los jóvenes cualificados con titulaciones universitarias y formación profesional en tecnología avanzada.
Una reforma laboral que pone a los trabajadores al pie de los caballos, al tiempo que se producen evasiones de capitales, los paraísos fiscales están más fuerte que nunca y con más dinero, negro y criminal, que nunca.La iglesia, no sufre ningún recorte en su asignación anual de más de 11 mil millones de euros.La corrupción afecta al conjunto del sistema, a la Casa Real en su columna vertebral, la familia del rey, el primer partido que gobierna, en el caso Bárcenas, en el caso de los eres en el PSOE de Andalucía, el caso del PP en Valencia, etc.
La fractura que ha generado esta situación es muy grave, es una fractura de gran alcance. Este modelo se considera agotado por la ciudadanía que sufre las consecuencias de la política neoliberal y como punto de lanza, las exigencias del Fondo Monetario Internacional, del Banco Central y de la Unión Europea (troika), como: las privatizaciones, el aumento de la edad de jubilación, la reducción de los salarios, unas relaciones laborales de esclavitud… de manera grosera y provocadora se han entregado miles de millones de euros públicos a la banca especulativa para tapar sus agujeros, es decir, el botón de muestra clara de que se rescatan los bancos y no a las personas. La calidad de la democracia salta por los aires cuando se compromete un programa con el electorado y se hace todo lo contrario. Al mismo tiempo, se rechaza una ilp avalada por un millón y medio de firmas por la plataforma contra los desahucios ¿Qué garantías puede ofrecer un gobierno que ha traicionado su programa electoral y los compromisos contraídos con el electorado y con la sociedad española para alcanzar ningún pacto?
La monarquía ha suspendido en valoración y en respaldo popular, obtiene notas bajísimas entre la juventud y el conjunto de la sociedad.Este sistema bipartidista como están diciendo todas las encuestas está siendo rechazado por la ciudadanía como un modelo basado en una ley electoral injusta y fraudulenta. Y sus prácticas han estado marcadas por pactos sobre bases neoliberales incluida la modificación de la constitución para priorizar la deuda sobre las políticas sociales.La operación, la hoja de ruta, es la siguiente, o un pacto con los sindicatos, la patronal, los partidos y el gobierno, para salvar la monarquía, el bipartidismo y un modelo económico que empobrece al 70% de la población o el otro camino, la oposición a estos recortes y la alianza con los movimientos sociales que están haciéndole frente, y lo que debe quedar claro es que la gente que se enfrenta a esta política tiene derecho a ser consultada, a que haya un referéndum sobre las políticas concretas que vayan a usarse, que se ensayen iniciativas de democracia directa.Para concluir, no a un pacto por arriba que vuelva a las andadas, de actuar sin contar con su ciudadanía salvando el estatus quo y profundizando en la separación de la gente de las instituciones políticas y económicas. Tenemos que seguir en la calle reclamando un proceso constituyente ante el fracaso de las políticas neoliberales y del régimen político.Entonces, lo que se debe hacer, el único pacto posible en España, es un proceso constituyente dotando de instituciones nuevas, valores republicanos y democracia real y de esperanza los anhelos de nuestro pueblo.Antonio Romero
Presidente de honor del PCAMiembro de la comisión ejecutiva de IU-LVCACoordinador de la red de municipios por la III República