TCAM-ALGECIRAS/REDACCIÓN
La tensión en las aguas que rodean al Peñón no cesa, a pesar de los a los incidentes que se vivieron en la madrugada del miércoles al jueves. En la noche de ayer, de nuevo cinco pesqueros de Algeciras volvieron a ser hostigados en la noche de ayer por la Policía de Gibraltar, que repitió su actuación contra los barcos de la cofradía algecireña, a los que impidió faenar en la zona marítima que la colonia británica considera propias.
Los pesqueros insistieron anoche en volver a faenar en las mismas aguas, y salieron del puerto de Algeciras sobre las 21.30 horas. Los cinco barcos de pesca, tres de los que se salieron ya se vieron implicados en los incidentes de esta semana ayer y otros dos más fueron escoltados por dos patrullas de la Guardia Civil hasta la bocana sur del puerto de Gibraltar.
En cuanto llegaron a la zona, antes incluso de comenzar su faena, los pescadores ya advirtieron la aproximación de las patrulleras gibraltareñas, que inmediatamente los rodearon. Según los pescadores, las patrulleras del Peñón actuaron inicialmente de la misma manera que el día anterior, cruzándose entre los pesqueros y dando vueltas a su alrededor a gran velocidad. Unas maniobras arriesgadas que han podido provocar incluso el contacto con uno de los pesqueros.
Sin embargo, poco después las cuatro embarcaciones de la Royal Gibraltar Police han ido aminorando su hostigamiento directo para evitar más situaciones de riesgo, optando por hacer ruido con los motores de sus embarcaciones para espantar la pesca.
Sobre la medianoche, uno de los pesqueros abandonó la zona mientras que otros tres decidieron echar las redes, lo que provocó que las patrullas de la RGP insistieran en sus maniobras de acercamiento y ruido con sus motores.
Los impedimentos de las patrulleras gibraltareñas, junto con el cambio de marea, hicieron que los cuatro pesqueros desistieran de faenar en la zona sobre las 1.00 horas y optaran por hacerlo en mitad de la Bahía de Algeciras.
Los representantes de los barcos algecireños han lamentado este nuevo episodio de tensión con Gibraltar, un conflicto que tras tres meses sin solución, según aseguran, está provocando que los pescadores empiecen a sufrir graves problemas económicos.
Tras los incidentes de la noche del miércoles los pescadores, patronos y armadores de Algeciras estuvieron deliberando durante todo el día de ayer si salían o no al caladero en conflicto. Finalmente, optaron por volver a la zona, aclarando que su intención no ha sido la de provocar sino la de “ver si habían cambiado de postura”.
El conflicto pesquero, que ha puesto de nuevo en evidencia el litigio sobre las aguas que rodean al peñón, comenzó el pasado mes de marzo, cuando el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, decidió romper el acuerdo suscrito en 1999 por el anterior gobernador, Peter Caruana, y que permitía a los pesqueros de La Línea y de Algeciras, actualmente unas sesenta embarcaciones, faenar con sus redes en aguas próximas a la colonia británica. Picardo ha esgrimido que ese acuerdo era ilegal porque iba contra una ley medioambiental local anterior de 1991, que prohíbe faenar con cualquier tipo de redes, mientras que los pescadores sostienen que sus artes son legales en España y en la UE.