Agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han culminado una operación en la que han desarticulado un grupo de narcotraficantes que supuestamente introducía grandes partidas de hachís en embarcaciones neumáticas a través del río Guadalquivir. En el operativo han sido detenidas 29 personas, entre las que se encuentran los principales responsables de la red y los miembros del grupo que participaron en el desembarco de la droga.Según informa en un comunicado el Ministerio del Interior, además han sido intervenidos 1.100 kilos de hachís en un vehículo en el que los narcos trataban de huir y que, cuando era perseguido por el helicóptero que formaba parte del dispositivo de vigilancia, sufrió un accidente y se precipitó en el interior de un canal.El Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CICO) coordinó las investigaciones iniciadas de forma paralela por la Policía Nacional y la Guardia Civil sobre esta organización, dedicada a la introducción y distribución de importantes cantidades de droga por el río Guadalquivir hasta la localidad sevillana de Isla Mayor.Según añade el comunicado, las averiguaciones realizadas por ambos cuerpos policiales permitieron verificar que el grupo investigado había intentado en diversas ocasiones introducir diferentes cargamentos de hachís por vía marítima en nuestro país, operaciones que resultaron fallidas por variadas circunstancias.De hecho, a principios del mes de junio los agentes desplegaron un dispositivo conjunto ante las fundadas sospechas de que el grupo tuviera ultimados los detalles para trasladar hasta tierra firme una embarcación cargada con gran cantidad de hachís procedente de Marruecos. La lancha sufrió una avería y fue finalmente localizada en alta mar. A bordo no se encontró ningún fardo, ya que, con toda probabilidad, la droga había sido arrojada al mar por la tripulación al percatarse de la presencia policial.Las investigaciones sobre el grupo continuaron y, ya en el mes de septiembre se supo que, a la altura del término municipal de Isla Mayor, botaron una lancha de 14 metros de eslora provista de dos motores fuera borda que se dirigía río abajo hacia la desembocadura en Sanlúcar de Barrameda. La embarcación viajaba “escoltada” por dos pesqueros con la finalidad de sortear los mecanismos de vigilancia del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE).Un día más tarde se constató que pretendían descargar el estupefaciente en las costas españolas, por lo que se desplegó un amplio dispositivo de vigilancia en torno al cauce del río Guadalquivir, en las poblaciones de Sanlúcar de Barrameda e Isla Mayor. De madrugada, los agentes detectaron la presencia de la embarcación que, cargada de bultos y con cinco tripulantes a bordo, navegaba a gran velocidad en dirección a Sevilla.A la altura de la localidad de Isla Mayor comenzaron la descarga del estupefaciente, momento en el que un vehículo comenzó la huida con parte de la droga al detectar la presencia de las fuerzas de seguridad, siendo perseguido por el helicóptero de la Guardia Civil. Tras circular por caminos de grava a gran velocidad y sin luces, la furgoneta sufrió un accidente y cayó al interior de un canal, emprendiendo sus ocupantes la fuga a pie.La Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil añade que v varias batidas en la zona permitieron la detención de nueve personas implicadas en el desembarco del hachís. Además, el conductor de la furgoneta accidentada se personó en el Puesto de la Guardia Civil fingiendo que le habían robado el vehículo y que había sido agredido, y fue igualmente arrestado. La lancha utilizada para transportar la droga fue localizada oculta en unos caños próximos al lugar del desembarco en una zona de difícil acceso.En una segunda fase del operativo desplegada días más tarde en las localidades gaditanas de Algeciras y Sanlúcar de Barrameda y en las sevillanas de Isla Mayor, Lebrija y Dos Hermanas, fueron localizados y detenidos el resto de miembros del grupo, 19 personas más entre las que estaban los principales responsables del grupo. Además se practicaron cinco registros domiciliarios. Se han intervenido dos embarcaciones semirrígidas, cinco vehículos, una moto de agua, 5.000 euros en efectivo, numerosos móviles, dos teléfonos satelitarios, dos GPS y equipos de transmisiones portátiles.La operación ha sido realizada de forma conjunta por agentes de los Grupos de Respuesta Especial al Crimen Organizado (Greco) de la Policía Nacional de la Costa del Sol y de Jerez, adscritos a la Comisaría General de Policía Judicial; y por agentes de los Equipos de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Guardia Civil de Cádiz y Oviedo. Fuente: EP