Durante esos días, los agentes locales controlarán furgonetas y todo tipo de camiones, independientemente del país en el que estén matriculados, incidiendo la vigilancia y control en aspectos tales como la velocidad a la que circulan, las horas de conducción y descanso, el tacógrafo, el exceso de peso, los defectos técnicos del vehículo, la seguridad de la carga transportada, la documentación del vehículo y conductor, el uso del cinturón de seguridad por parte del conductor y de los ocupantes, la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas, o la utilización del teléfono móvil, entre otros.
El desarrollo de esta campaña obedece a que la Dirección General de Tráfico ha detectado que este colectivo específico se ha convertido en protagonista de una serie de riesgos, por lo que a través de la prevención se busca reducir la siniestralidad, así como lograr una mayor concienciación tanto de conductores como de cargadores y empresas transportistas conducir una furgoneta no es igual que conducir un turismo: el comportamiento dinámico es diferente, sobre todo cuando va cargada, y que además, la correcta sujeción de la carga es fundamental, ya que cualquier desplazamiento de la carga cambia el comportamiento dinámico del vehículo por desplazamiento del centro de gravedad.