En nuestra tierra la corrupción se ha convertido en una forma de gobierno. Este no es el primer caso similar. La corrupción se ha convertido en el engranaje que mueve parte de la administración y es la ciudadanía la que sufre estas enormes deficiencias. Creemos que este caso es una muestra de una concepción de la reindustrialización de nuestra provincia dedicada al enriquecimiento de unos pocos bien conectados con los partidos que han gobernado en Madrid y en Andalucía. No vivimos en una de las provincias con más paro por casualidad. Nuestros jóvenes no se tienen que marchar por una especie de castigo divino. Ni estamos instalados en una crisis permanente desde hace más de 40 años porque venga del cielo. Tampoco es simplemente la ambición deshonesta de algunos corruptos.
Todo esto es fruto de una política y de unos políticos que sistemáticamente han ido en contra de nuestra gente, obligándonos a subsistir y negándonos la posibilidad de tener un futuro aquí. Exigimos, por tanto, que además de la investigación judicial sobre el caso, se realice una investigación sobre los mecanismos administrativos que han permitido que se llevara a cabo este fraude; y que se asuman las responsabilidades políticas pertinentes, tanto en la administración estatal como en la autonómica. No podemos permitir que la imprescindible industrialización de nuestra provincia sea truncada por una administración que, en manos del bipartidismo, solo se dedica al enriquecimiento de una minoría a costa del subdesarrollo de nuestra provincia”.