IAM/EP Un año más miles de niños de la ciudad de Algeciras (Cádiz) han cumplido con la tradición de arrastrar latas para hacer ruido y evitar que los Reyes Magos, como cuenta la leyenda, se olviden de dejar juguetes en sus casas debido a la niebla que expandió el Gigante de Botafuegos y cubrió la ciudad.FOTOGRAFIAS TOMOYUKI HOTTA
Desde primera hora de la mañana de este domingo la concentración de pequeños, acompañados de sus latas, entre las que se podían ver obras de arte, se produjo en la Plaza de Andalucía. Allí la Delegación de Ferias y Fiestas repartió en torno a 10.000 dorsales aunque es imposible calcular el número exacto de participantes en la comitiva que partió desde el citado lugar hasta el Llano Amarillo, recorriendo las principales arterias de la ciudad y haciendo mucho ruido.
En la zona portuaria esperaba el alcalde, José Ignacio Landaluce (PP), para hacer entrega a los Magos de Oriente de las llaves de la ciudad una vez que arribaron a puerto a bordo de un barco. Los niños, mientras tanto, seguían haciendo ruido y ya esperan que los tres reyes dejen los regalos en sus casas, una vez que estos han respondido al ruido ensordecedor pero ilusionado de las latas.
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