TCAM-NACIONAL/M.P.
Los rectores de las universidades españolas no comparten las declaraciones del ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, sobre el sistema universitario español y se han mostrado preocupados al respecto. Wert pedía que los profesores universitarios justifiquen las horas que dedican a investigación y que las reviertan en docencia.
El comunicado de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas señala que el análisis de los datos disponibles, contrastados por diferentes organismos nacionales e internacionales, no permite compartir muchas de las afirmaciones, ni el diagnóstico, que se ha hecho del sistema universitario español.
Reconocen que “en España existe un claro desajuste entre recursos públicos empleados y resultados obtenidos en docencia, investigación y transferencia del conocimiento”, pero añaden que “los resultados son proporcionalmente muy superiores al esfuerzo público realizado”.
En docencia, el 79% de los estudiantes que inician sus estudios, finalizan con un título universitario -destacan- siendo la media en la OCDE del 70%. Además, en los últimos años se ha producido una clara mejoría del rendimiento académico, a raíz de la integración en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), a pesar de haber realizado la adaptación con un esfuerzo inversor “claramente inferior al de otros países”.
Aluden a que el nivel de formación actual de los universitarios españoles “ha demostrado claramente su adecuación” en el mercado actual. “No parece, pues, correcto -indican- relacionar la preparación de los estudiantes y la eficacia de la Universidad con la falta de empleo, especialmente entre los jóvenes”, y manifiestan que su preparación es académica “es claramente satisfactoria”.
España, la novena potencia científica
En su comunicado, los rectores aluden a la producción científica universitaria. Entre 1997 y 2007, la producción creció un 80%, hasta constituir el 3,4 % de la producción científica mundial, realizándose dos terceras partes de este porcentaje en las universidades. Este esfuerzo ha convertido a España en la novena potencia científica, y en la octava en publicaciones por habitante, con resultados similares a Japón. En este ámbito, una universidad española se sitúa entre el 1% que agrupa a las mejores universidades del mundo, ocho universidades dentro del 2%, 24 en el 4% y todas las públicas y tres privadas, en el 10%.
Consideran que “es un resultado más que notable si consideramos que España sólo invierte en I+D+i un 1,39% de su PIB, muy lejos del 2,3% que es la media de la OCDE”, y añaden que “relacionando la producción científica por habitante con el porcentaje de gasto en I+D+i, resultamos ser uno de los cuatro sistemas más eficientes del mundo”.
El segundo país del mundo en patentes universitarias
Aunque, como señalan los rectores, en transferencia, España contribuye muy poco (0,8%) a las patentes mundiales, “el porcentaje de patentes que en España proviene del sector universitario, es el segundo más alto del mundo”, y afirman que “no es correcto señalar que el sistema universitario español es el principal responsable del bajo porcentaje de innovación de nuestro país”.
Recuerdan que “en los últimos años el Sistema Universitario Español ha estado sometido a importantes cambios para adaptarse al Espacio Europeo” y señalan que “las universidades necesitan actualmente estabilidad normativa y una financiación acorde con las capacidades y necesidades del país”, reclamando como “imprescindible”, un compromiso conjunto entre administraciones públicas y universidades.
Finalizan el comunicado afirmando que “las universidades estamos y estaremos siempre al servicio de la sociedad, dispuestas a continuar trabajando en la adecuación del sistema a las necesidades de nuestro país, especialmente en estos momentos de crisis”.