IAM/Redacción Un dato prácticamente similar al que reflejaba la encuesta de población activa publicada la pasada semana, indicadores que vuelven a darnos un baño de realidad frente a algunos mensajes macroeconómicos fuera de la realidad de lo que soportan los ciudadanos. Cádiz sigue sosteniendo datos de desempleo por encima del 30% de la población activa, nuestra población joven sigue decreciendo, y los números nos indican que 67.17% de las personas paradas están en el sector servicio, y 6 de cada 10 son mujeres. (Foto Paro).
Realmente preocupante la caída de la contratación con respecto al mes anterior, sobretodo en el sector servicio. En este sector se concentra el 67.8% del total de las contrataciones, la industria solo absorbe un 7.83% de las contrataciones. Estos indicadores concuerdan con los datos de afiliación y de la caída de la ocupación en 25.600 personas con respecto al trimestre anterior, tal y como se refleja en los datos de la EPA, indicadores que demuestran un estancamiento del empleo y de una estacionalidad de nuestro mercado de trabajo. Fracaso absoluto de las reformas laborales que han venido a empobrecer nuestra economía, a incrementar su precariedad y a generalizar una bajada de salarios. Estas nefastas consecuencias para el empleo con una dependencia cada vez mayor de nuestro modelo productivo hacia el sector servicio, se hace imprescindible un cambio de políticas para el empleo, y apostar por la diversificación de los sectores fundamentalmente el industrial y la derogación de las reformas laborales. Que el 95.24% de los contratos sean temporales no es un mal endémico, manifiesta un modelo fracasado para generar un empleo estable y con derechos.La afiliación media también indican los mismos parámetros con respecto a la media del mes de diciembre, una caída de la afiliación en cerca de 5000 personas, especialmente en el Régimen General, dato que refleja la alta estacionalidad del empleo que se crea: temporal y precario. Para el sindicato es absolutamente prioritario subir los salarios y acabar con la temporalidad y la desigualdad. Esa recuperación se debe de centrar principalmente en los salarios más bajos. CCOO es consciente que para acometer estas reivindicaciones hay que reforzar y tensionar los procesos de negociación colectiva y más en una provincia como Cádiz que ha soportado durante la última década una ínfima inversión pública, acumulando la falta de desarrollo de inversiones productivas y de comunicación. La lista de esta falta de inversión se acumula año tras año, caso como el de: Polígono Tecnológico y Logístico de Las Aletas, la obra de La Línea Férrea de La Línea – Bobadilla, la liberación de la A4 Cádiz – Sevilla, el desdoble de Vejer Fra. – Algeciras, de la de Arcos Fra. – Antequera, entre otras muchas, este cuello de botella que impide no solo un desarrollo económico y social para la provincia, sino que convierten la falta de empleo provincial en un paro estructural crónico y una desigualdad con el resto de territorios del estado intolerable.A esto se añade que del total de las personas paradas más de la mitad, el 52.09% (87.664) no perciben ninguna prestación, para paliar esta extensión arraigada de la pobreza en muchas familias es imprescindible la Renta Mínima de Inserción Social recién aprobada en Andalucía, exigencia permanente en los últimos años y que por fin ve la luz, ahora se hace necesario una difusión desde todos los ámbitos para que todas aquellas personas con necesidades accedan a esta ayuda lo antes posible, la gestión correcta desde los ayuntamientos, y una dotación suficiente presupuestaria para hacer frente a las necesidades reales en nuestra provincia son objetivos inmediatos de la administración autonómica.CCOO remarca que sus objetivos prioritarios para este año pasan por las subidas salariales y de las pensiones, la calidad del empleo y la lucha contra la desigualdad. La parálisis de la acción política en España y un Gobierno inoperante, hacen necesario que el sindicato logre situar en el centro del debate político y económico la agenda social que necesitan los ciudadanos; empleo de calidad, salarios y pensiones dignas, redes de protección social y unos servicios públicos de calidad.