El “modus operandi” que utilizaba esta joven delincuente consistía en elegir víctimas de avanzada edad y que estuvieran solas. Seguidamente entraba en las viviendas con la excusa de beber agua o ir al aseo y aprovechaba su estancia para “descuidar” dinero o joyas.
La detenida. cuenta con varios antecedentes, habiendo estado imputada hace escasas semanas por hechos similares.
Instruidas las correspondientes diligencias y con las pruebas aportadas pasó a disposición del Juzgado de Guardia. Se recuperaron joyas sustraídas, valoradas en más de dos mil euros.