IAM/Redacción. La Policía Local de Algeciras, en colaboración con la Dirección General de Tráfico, va a iniciar esta semana una nueva campaña de verificaciones con radar de velocidad en distintos puntos del término municipal, según ha informado el primer teniente de alcalde delegado de Seguridad Ciudadana, Jacinto Muñoz Madrid.
En este sentido, ha precisado que los controles se realizan preferentemente en aquellas calles y vías en las que los vehículos pueden alcanzar mayor velocidad como la avenida Virgen del Carmen, carretera al Rinconcillo, calle Orión, carretera de Getares, carretera de los Yankis y los polígonos industriales de La Menacha y Cortijo Real, entre otros.
Estos controles no solo permiten detectar a los infractores que ponen en peligro a los peatones, ciclistas, motoristas y en general a los conductores y ocupantes del resto de vehículos que circulan por las calles, sino que también proporcionan información de interés sobre qué vías son las más problemáticas desde el punto de vista de la circulación a una velocidad inadecuada, donde se produce un mayor riesgo de atropellos, permitiendo establecer en cuáles de ellas debe intensificarse la labor de disciplina viaria por parte de los agentes de la Policía Local.
El primer teniente de alcalde ha explicado que en las anteriores campañas realizadas desde enero de este año, se ha controlado un total de 16.949 vehículos, de los que solo han sido denunciados 139, lo que representa un índice de infractores del 0.8% de los casos.
Para el delegado municipal “esta cifra muestra la necesidad de seguir insistiendo en la realización de este tipo de controles rutinarios, de carácter preventivo y de pacificar la circulación de vehículos a motor por nuestras calles, para lograr mejorar la seguridad vial de todos los usuarios”, al tiempo que ha incidido en el hecho de que “respetar lo límites de velocidades en ciudad es muy importante, ya que los estudios demuestran que en impactos a 30 kilómetros por hora, solo el 10% de los atropellados fallecen, porcentaje que se multiplica por cinco cuando la velocidad del vehículo alcanza los 50 kilómetros por hora, siendo prácticamente nulas las posibilidades de sobrevivir a un atropello por un vehículo que circule a 80 kilómetros por hora”.
Muñoz Madrid ha destacado que estos controles de velocidad “lejos de perseguir un afán recaudatorio que no obtiene por el bajo índice de denunciados, centran su finalidad en aspectos preventivos y de concienciación, puesto que el objetivo son las cero multas”.