“Es inviable que España siga pagando el mantenimiento de una red de autovías de gran capacidad de 12.000 kilómetros de longitud con cargo a los presupuestos”, subrayó Feito, que considera que “antes o después el Gobierno no podrá evitar articular algún tipo de peaje” en estas vías, al igual que ya han hecho otros países europeos.”España compite en Europa con países como Francia y Alemania con un presupuesto que cuenta con una partida para conservación de carreteras que dobla o triplica a la de esos países, cuando además no se destina todo lo que se tendría que destinar a ese mantenimiento”, expuso.Aseta calcula que implantar el cobro de una tasa por uso de esta red de alta capacidad generará ingresos de entre un mínimo y un máximo de 1.700 y 10.000 millones de euros. Los importes variarían en función del tipo peaje que se implante, si se articula una tasa gradual (por tramos, por franjas horarias o tipos de vehículos) o bien una general y universal para todos los usuarios y en toda la red.El también presidente de la Comisión de Economía de la CEOE considera que es el momento de que el Gobierno afronte esta medida, al considerar que los beneficios que generaría compensarían el coste político que conlleva. “Sólo el anuncio de la decisión posibilitaría una relajación de la prima de riesgo y de los costes de financiación”, aseveró.El presidente de la patronal de autopistas enmarcó esta medida en su convencimiento de que es necesario impulsar la inversión para apuntalar la “recuperación de la economía”.Inversión en autopistas madurasEn esta línea, Aseta propone poner marcha un plan para que las concesionarias de las autopistas más maduras, las más antiguas que cuentan con un tráfico consolidado, inviertan 1.334 millones de euros en su mejora o ampliación.Esta inversión se financiaría ampliando los plazos de concesión o subiendo peajes y según sus datos generaría unos 24.000 puestos de trabajo. La medida ha sido ya puesta en práctica en Francia.En rueda de prensa, el también presidente de la Comisión de Economía de la CEOE señaló los beneficios que para los usuarios y la dotación de infraestructuras generarían estas dos medidas.Que los extrenjeros contribuyanAsí, en cuanto a la articulación del peaje en autovías, además de garantizarse fondos recurrentes para su mantenimiento, permitiría “obtener ingresos de usuarios extranjeros que actualmente no contribuyen al pago de las carreteras españolas”.”Además, se eliminaría la actual presión que existe sobre las autopistas de peaje, que los ciudadanos evitan pagar, e incluso piden no pagar”, subrayó Feito.La inversión en las autopistas de pago más maduras se destinará a ampliar su capacidad, mejorar su seguridad y su impacto medioambiental, así como la calidad del servicio e incluso construir nuevos tramos para conectarlo con puertos y aeropuertos”.Feito enmarcó estas dos iniciativas en su convencimento de que es preciso “afianzar” la actual recuperación de la economía con un “cambio en la política de inversión”. Además, subraya que se trata de inversiones que no afectan a la deuda y al déficit público, “sin poner en peligro el proceso de consolidación, que es la prioridad”.