IAM/Redacción Los investigadores creen que la lancha que ayer colisionó en aguas del Estrecho de Gibraltar con una patrullera de la Agencia Tributaria, en una maniobra que causó la muerte a sus cuatro ocupantes, hacía labores de apoyo a otra embarcación que transportaba hachís.
Fuentes de la investigación han relatado que la patrullera de la Agencia Tributaria acudió al lugar, en el mar al sur de Estepona (Málaga), tras recibir un aviso de un helicóptero de vigilancia que había avistado una embarcación semirrígida con un montón de fardos de hachís visibles.Una segunda embarcación, cuya carga no se pudo avistar desde el helicóptero porque llevaba una manta cubriendo parte de la cubierta, se acercó a la primera semirrígida.Tras observar estas dos lanchas el helicóptero dio aviso a la patrullera de la Agencia Tributaria y se marchó del lugar, puesto que en ese momento, según las mismas fuentes, tuvo que atender otra incidencia.Cuando la patrullera llegó a la zona que le había marcado el helicóptero estas dos embarcaciones ya no estaban allí.
En su lugar se encontraron a una tercera que, al parecer, no portaba hachís, sino bidones de gasolina.Los investigadores explican que es “muy habitual” que los narcotraficantes utilicen varias embarcaciones para las operaciones de traslado de droga en aguas del Estrecho de Gibraltar, ya que mientras unas llevan la mercancía, otras hacen labores de apoyo, como portar gasolina, y de distracción, en caso de que haya alguna vigilancia cerca.En este contexto los investigadores creen que es bastante probable que la lancha siniestrada jugara el papel de apoyo a las otras dos, cuyo rastro se investiga.Cuando la patrullera se aproximó a la embarcación que encontró en la zona, ésta realizó una maniobra “muy agresiva” que “hizo imposible evitar la colisión”, que causó la muerte a sus cuatro ocupantes, cuyas identidades aún no han sido hechas públicas.El juzgado de guardia de Algeciras, a cuyo puerto fueron trasladados los cuatro cadáveres, se ha hecho cargo de abrir diligencias para investigar el accidente.