IAM/EP El alcalde de Algeciras (Cádiz), José Ignacio Landaluce (PP), ha confirmado este viernes que la Guardia Civil “se ha llevado documentación” del Ayuntamiento de la ciudad que está relacionada, presuntamente, con la ‘operación Madeja’ que investiga la titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla, Mercedes Alaya. En declaraciones a los periodistas, el alcalde algecireño ha explicado que “los agentes nos han pedido discreción y cumplimos con el mandato del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla”, que instruye el caso relacionado con las presuntas irregularidades cometidas por dirigentes políticos y empresas como Madeja o Fitonovo, entre otras, en la adjudicación de proyectos urbanísticos. En el caso concreto de Algeciras se investiga la presunta adjudicación irregular por parte del anterior gobierno de la ciudad (PSOE-IU), de las obras que “se llevaron a cabo en el antiguo Polideportivo El Calvario”, ahora convertido en un complejo en el que se ofrecen servicios de gimnasio, piscina cubierta, pistas de pádel, cafetería y otros, denominado Body Factory. Como hizo hace ya unos meses cuando se conoció que Algeciras podría estar implicada en el caso, Landaluce ha destacado su colaboración con la justicia. “En su momento ordenamos la custodia de los documentos por parte de la Secretaría General”, algo que se sigue produciendo tras la visita de los agentes del Instituto Armado, que en su edición de este viernes adelanta el Grupo Joly. “Hicieron fotocopias compulsadas y toda la documentación sigue custodiada”, abunda el regidor ‘popular’. Los departamentos afectados son Contratación, Urbanismo y Deporte. Los dos primeros eran gestionados por el PSOE cuando se produjo la adjudicación, mientras que la parcela deportiva correspondía a IU. El equipo de gobierno actual del PP mantiene el discurso de colaboración con la investigación y, según han recalcado a Europa Press fuentes municipales, “el PP no tiene nada que esconder ,ya que todo el lío de Body Factory se hizo con gobiernos de izquierdas”. En concreto bajo el mandato de Tomás Herrera (PSOE) y cuando el edil de Urbanismo era Diego Sánchez Rull, también socialista, quien posteriormente ocupó la Alcaldía tras la renuncia del primero.
