Cuando se va a cumplir un año desde que el pleno municipal aprobara una moción de Izquierda Unida por la que “se mandatada al equipo de gobierno para que, en un plazo no superior a seis meses, acometa la elaboración, debate y aprobación de unas ordenanzas municipales sobre elementos constructivos y homogenización de fachadas en nuevas construcciones y rehabilitaciones en la barriada de San Isidro”, Alcántara requiere del alcalde que expongan las razones por las que no se ha dado cumplimiento al mismo.Comos se recordará, en su iniciativa, esta formación política, Inmaculada Nieto, hace constar que “el barrio de San Isidro es sin duda alguna una joya del patrimonio inmobiliario local, que ha conseguido sortear a lo largo de los años la vorágine especulativa que ha asolado buena parte de nuestra ciudad, conservando un espacio singular de casas bajas, de calles con encanto y de típicos rincones. Este barrio es, sin duda alguna, un patrimonio, no sólo de la ciudadanía que él habita, sino del conjunto de esta ciudad que puede exhibirlo orgullosa a propios y extraños, destacando un modelo constructivo y urbanístico, tristemente perdido en resto de Algeciras”.Izquierda Unida sostenía que los instrumentos de ordenación urbana vigentes en nuestra ciudad tienen como objetivo mantener su actual volumen de edificabilidad y salvaguardarlo de tentaciones especulativas; pero si bien este objetivo es loable, la experiencia nos ha demostrado que resulta insuficiente para mantener su estilo arquitectónico tradicional y por ende el tipismo de sus calles mayoritariamente empedradas.IU sacaba a colación que en los últimos años, la construcción de viviendas de corte moderno y, a criterios de muchos, incompatibles estéticamente con el diseño tradicional que predomina en San Isidro; han supuesto la indignación de buena parte de los vecinos, a la vez que ponía de manifiesto la insuficiencia de los instrumentos urbanísticos vigentes.El concejal de la federación de izquierdas, lamenta que transcurrido este tiempo, solo se haya tenido noticias de estas ordenanzas a través de los anuncios públicos de inminencia lanzados por los responsables municipales, sin que se haya hecho efectivo el inicio de su tramitación en los órganos competentes de la administración local. “No sabemos si es un problema de falta de sensibilidad patrimonial o de incapacidad, pero lo cierto es que el equipo de gobierno se ha mostrado hasta la fecha incapaz de ejecutar el mandato plenario”, concluía Alcántara.