IAM/Redacción La Sección de Medio Ambiente y Urbanismo de la Fiscalía General del Estado ha informado a Verdemar-Ecologistas en Acción de que, tras la denuncia presentada por dicho colectivo el 19 de febrero, iniciará una investigación respecto a las captaciones de agua de la Garganta del Capitán y otras en el Parque Natural de Los Alcornocales por parte del Ayuntamiento de Algeciras.
En un oficio de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, se indica que va a proceder a “recabar la información oportuna” y a hacer las averiguaciones correspondientes.Cabe recordar que Verdemar formalizó una denuncia contra el Ayuntamiento algecireño por un presunto delito de “hurto agravado” de agua a cuenta de las captaciones que realiza en la Garganta del Capitán y en otros manantiales del Parque Natural de Los Alcornocales para abastecimiento urbano e industrial.En la denuncia, consultada por Europa Press, el colectivo ecologista expone que estas captaciones se realizan “hasta dejarlo con un volumen muy inferior a su caudal ecológico”, lo cual es “manifiestamente ilegal y un auténtico sinsentido que no se sostiene desde el punto de vista ambiental ni desde el de la seguridad hídrica”.Detalla que en las zonas donde extrae el agua “para venderla a los ciudadanos de Algeciras u otros” es el Parque Natural de Los Alcornocales, con lo que forma parte de los Espacios Naturales Protegidos de Andalucía y se establecen por ley medidas adicionales para su protección.
Forma parte de la Reserva de la Biosfera Intercontinental del Mediterráneo, de la red Natura 2000, es Zona de Especial Protección para las Aves desde 1989 y Lugar de Importancia Comunitaria de la Unión Europea, entre otros.Argumenta Verdemar en su denuncia que Algeciras “tiene más que asegurado el suministro, al igual que la mayoría de los municipios del Campo de Gibraltar, sin tener que recurrir a aportes extraordinarios de manantiales del Parque Natural de Los Alcornocales”. Sin embargo, “sigue conduciendo arroyos a tuberías dentro del Parque Natural con concesiones sin validez, ‘de carácter temporal’, del año 1962″.
“MOTIVOS ECONÓMICOS”
Razonan en su denuncia que “prescindir del agua embalsada únicamente por motivos económicos y literalmente destrozar un río en un espacio natural protegido para enriquecer a una empresa semiprivada (Emalgesa) es inadmisible”.Abunda Verdemar que “dejar en manos de una empresa el control total de la vida de un río equivale a lo que hemos visto sobre el terreno: dejarlo prácticamente sin agua solamente para engrosar su cuenta de resultados”.Asegura el colectivo ecologista que la vegetación de la Garganta del Capitán y otras dentro del parque natural “languidecen desde que se iniciaron las captaciones, y más especialmente desde que se recreció el nivel de la presa”.Sostiene que “concatenando varios años de sequía consecutivos se produciría una catástrofe ecológica en el arroyo, ya que moriría toda la vegetación de ribera”. Se da la circunstancia de que “buena parte” de la flora de la zona “está protegida por Ley”, enumerando la denuncia a modo de ejemplo más de 25 especies incluidas en la Lista Roja de la Flora Andaluza. Igualmente, alude a odonatos protegidos.Finalmente, resume que “vender agua de arroyos de un parque natural sin ningún tipo de autorización ilícitamente, poniendo en peligro la flora y fauna del lugar, puede ser un delito de hurto agravado, de conformidad con el artículo 349 y 351 del Código Penal”.