IAM/Pymestrecho El Estudio de arquitectura Francisco Soto Cubero, después de más de 30 años de experiencia, puede decirse que es uno de los pilares de nuestra comarca. Hoy AMI Peugeot nos introduce en el interesante y complicado mundo arquitectónico. Entrevistamos a Francisco Soto, arquitecto y referente en el Campo de Gibraltar… -Tu estudio de arquitectura es uno de los que tiene mayor antigüedad en Algeciras…FS: Con el Estudio de Arquitectura Francisco Soto Cubero llevamos 34 años de ejercicio profesional en Algeciras y eso da para considerarme como un verdadero “veterano” en esta profesión. -¿Has realizado grandes obras públicas en Algeciras?FS: Hemos realizado muchas obras públicas y otras privadas con el Estudio de arquitectura Francisco Soto Cubero, pero sin duda alguna las más significativas han sido la Plaza de Andalucía y en la Cámara de Comercio. Además, he colaborado mucho con el Puerto de Algeciras en distintas obras y proyectos como el Acceso Central o el Paseo de Cornisa. Recuerdo mucho que hace unos años que gané un concurso para el desarrollo de la dársena deportiva, el cual por una serie de circunstancias no se llegó a realizar. -Suponemos que cuando consigues un trabajo de arquitectura, se obtiene por medio de un concurso…FS: Habitualmente cuando en el Estudio de arquitectura Francisco Soto Cubero conseguimos un proyecto, es por medio de un concurso y más en los últimos años porque se ha generalizado la necesidad de hacerlo por los contratos disponibles. En ocasiones son concursos de ideas, méritos o para adjudicaciones basándose en algunos criterios económicos.-Entre tus clientes privados, ¿solo trabajas en la zona de Algeciras? FS: En los últimos años y debido a la reciente crisis económica, la situación ha sido un poco delicada por lo que decidimos abarcar los proyectos a nivel de la comarca. Yo soy de Úbeda, Jaén y los tres primeros años los dediqué a aquella zona. Tiempo más tarde me fui asentando más a Algeciras y sus alrededores. -La arquitectura no supone solo una profesión sino implica una disciplina artística, ¿cómo surge en ti esa inquietud?FS: Desde muy joven sentí cierta afinidad con el campo de la arquitectura, más porque en Úbeda hay un importante patrimonio arquitectónico y me hacía sentir cierta atracción hacia este mundo. Además, tuve algunas capacidades para el dibujo y ánimos por parte de mis parientes que me ayudaron mucho para decidirme sobre mi profesión.-A la hora de ponerte ante un nuevo proyecto, ¿qué idea primaria desarrollas para comenzarlo?FS: El instinto de creación en la arquitectura no se diferencia mucho de otras actividades intelectuales y artísticas. Te puedes mover desde unos comienzos donde lo que predomina es la toma de información y datos, lo cual estimula tu intelecto para acabar teniendo capacidad para imaginar que es “la tecla que hay que tocar”. Desde mi punto de vista, es muy difícil crear nada sin verlo previamente pues debes responder a unas motivaciones determinadas. -A nivel empresarial, ¿por qué crees que tus clientes confían en ti?FS: Nuestros clientes confían en el Estudio de arquitectura Francisco Soto Cubero porque suele crearse una cierta empatía y sinergia. Cuando tomas contacto con tus clientes, pronto eres capaz de saber si esa persona va a confiar plenamente en ti o no. Considero que siempre hay que utilizar cierta capacidad de seducción y tener constancia de lo que has podido hacer anteriormente también es un capítulo importante. -El proceso de comunicación que debe haber entre arquitecto y cliente tiene que ser intenso en el desarrollo del proyecto…FS: Durante mis primeros años como arquitecto, recuerdo que hice algunas casas en Úbeda y las más destacadas las hice siendo bastante joven, tanto que conseguí unos clientes importantes que incluso ahora me recuerdan y me saludan con mucha cordialidad, cosa que me hace feliz porque a veces las relaciones entre clientes y arquitectos no son las mejores.En Algeciras hice una casa para un amigo, Antonio Mena, que es originario de Úbeda. Tanto él como su mujer se sienten felices y a mí eso me hace absolutamente feliz pues me siento una parte muy importante en la familia de él.Estas son aventuras delicadas porque hay mucho dinero en juego, muchas decisiones y el resultado termina siendo incierto. Por ese motivo los clientes son tan reservados y conservadores a la hora de elegir un arquitecto o dar el visto bueno a un anteproyecto. -¿Cuál es tu edificio preferido del Campo de Gibraltar?FS: Personalmente, mi edificio preferido del Campo de Gibraltar es la Escuela de Arte y Oficio de Algeciras porque es un lugar absolutamente representativo de la ciudad. Ya hablando de obras en las que participé me gusta la Cámara de Comercio, la verdad es que la adoro porque me dio mucho trabajo y el resultado fue simplemente majestuoso.-Como experto en el mundo de la arquitectura, ¿cómo valoras el diseño en los vehículos Peugeot?FS: Los vehículos Peugeot me llamaron la atención desde que era pequeño cuando por Úbeda aparecían turistas franceses que usaban esos vehículos y me resultaron fascinantes porque se identificaban perfectamente con la imagen del francés y era algo muy especial. Considero que los coches Peugeot tienen un sello muy particular y eso es lo que más me interesa de la marca.-De todos los proyectos que has realizado a lo largo de tu carrera, ¿con cuál te sientes más identificado?FS: El proyecto con el cual me siento más identificado es el concurso de ideas que gané con el puerto de Algeciras para la recuperación arquitectónica de la Isla Verde. Recuerdo que fue un proyecto al que le puse muchísimo cariño y mucha intensidad. Fue muy significativo porque se trataba de un proyecto simbólico de una recuperación espacial, un centro de interpretación, hacer una atención a la muralla asistente y a ese dominio antiguo donde empezó la colonización. Gané el concurso pero por distintos motivos la obra nunca se llevó a cabo pero sin duda es un proyecto muy especial para mí. Construir un edificio o una vivienda… No es solo una profesión sino todo un arte. Disfrutar de una ciudad hermosa, un placer al cual todos tenemos derecho y en el Estudio de arquitectura Francisco Soto Cubero lo saben muy bien.