IAM/Redacción Los síntomas son evidentes, ojos irritados, olores “que duelen”, picor en la garganta. Ya no sólo es en la zona de las industrias (La Línea, Palmones o San Roque) sino en el corazón de Algeciras donde se utiliza la noche para “eliminar gases”. Ciudadanos y trabajadores denuncian ya casi a diario episodios de este tipo.
Sin ir más lejos, la madrugada de viernes, empresas de dentro del recinto portuario comenzaron a lanzar gases al aire en tal volumen que los trabajadores que circundaban la zona definieron como “irrespirable” el ambiente.
Esto se une (en una sola semana) a los episodios de ceniza en Acerinox, los constantes vertidos que sufren los vecinos de Palmones y a la denuncia (publicada en este medio) de la “humareda que nos hizo salir corriendo de la playa”. Permitir esto a menos de un kilómetro del centro de una ciudad tan poblada como Algeciras da idea del respeto que la industria tiene a la ciudadanía.
Es hora de tomar cartas en el asunto, las autoridades están “ausentes” eso es más que evidente, es decir, o la ciudadanía exige o todo sigue igual.