IAM/Redacción
“Parece ser que la memoria del señor alcalde y el compromiso incluso firmado es agua de borraja o, dicho de otra manera, que su palabra no vale nada, o, en otro sentido, que es un mentiroso compulsivo, pues ha manifestado hasta la saciedad que se iba a poder vender cerveza”, apuntaban los quiosqueros en un comunicado. “La vinculación del acto propio de un mandatario de la administración cuando no se cumple provoca inseguridad jurídica en los ciudadanos. Los políticos deben ser responsables de lo que dicen y, si no cumplen, que dimitan, que a lo mejor en su casa lo hace estupendamente, pero para repesentar a los ciudadanos no valen las mentiras, la arrogancia ni la soberbia”, añade la nota. “Señor alcalde, le hemos dado la mayoría para gobernar, no para que le gobiernen a usted como se desprende de su comportamiento. Nos da la sensación de que nos gobiernan desde las sombras ciertos poderes fácticos que usted sabe y conoce bien”, finalizaron los quiosqueros
