IAM/EP La iniciativa ha surgido en las redes sociales, bajo el hashtag ‘Volvemos1f’, y ha reunido a miles de personas que durante algo más de cuatro horas han recorrido las calles de la capital como protesta por las últimas informaciones relativas al extesorero del PP Luis Bárcenas, que llegó a tener 22 millones de euros en una cuenta en Suiza, y los supuestos sobresueldos en dinero negro a dirigentes de la cúpula popular. La marcha, que se ha desarrollado sin incidentes, ha comenzado sobre las siete de la tarde en las inmediaciones de la sede nacional del PP ubicada en la calle Génova, donde por segundo día consecutivo la Policía ha establecido un fuerte dispositivo. Cuatro lecheras custodiaban el inmueble, la vía estaba cerrada al tráfico y habían sido cortados todos los accesos a la misma desde las calles aledañas. Los congregados, como ocurriera en las anteriores convocatorias, han quedado divididos en dos grupos, uno ubicado en la zona de plaza de Colón, y otro en las inmediaciones de la glorieta de Alonso Martínez. Un helicóptero de la Policía Nacional y más de treinta furgones de la Unidad de Intervención Policial (UIP) vigilaban la protesta. La presencia policial y la imposibilidad de aproximarse a la sede del PP en Génova 13 ha hecho que el grueso de los manifestantes, varios miles de personas, hayan decidido de manera espontánea iniciar una marcha por las calles de la almendra central de Madrid, durante la cual han cortado el tráfico rodado en varias vías. De esta manera, varios miles de personas, de todas las edades, han avanzado desde Alonso Martínez por la calle Sagasta hasta la calle de Fuencarral y, desde allí, a la Gran Vía madrileña. Desde allí, la marcha ha recorrido la calle Alcalá hasta Cibeles, donde han interrumpido el tráfico durante más de 20 minutos y donde ya había instaladas vallas para evitar que pudieran llegar hasta el Congreso. MARCHA HASTA SOL La marcha ha proseguido por el Paseo del Prado hasta Atocha para, desde allí, ir hasta Antón Martín para finalizar en la céntrica Puerta del Sol pasadas las once de la noche. Una vez allí, el millar de personas que todavía secundaba la convocatoria ha comenzado a dividirse en pequeños grupos ante la presencia policial. A esa hora, un grupo minoritario seguía la protesta cortando el tráfico en la Gran Vía madrileña pero, ante el llamamiento de la Policía, había comenzado a disgregarse. Los lemas más coreados han sido los de “dimisión” y “ladrones” pero también han sido multitud de veces repetidas consignas como “Cospedal, a Soto del Real”, “El próximo parado, el jefe del Estado”, “El pueblo, unido, funciona sin partido” o “Sin dimisión, revolución”. Los gritos de indignación han sido más contundentes al paso por ciertos edificios como el Ministerio de Sanidad, donde se ha coreado al unísono “sanidad pública ya”, o ante la sede de la Comunidad de Madrid en la Casa de Correos, con consignas de “chorizos” y “ladrones”. Los agentes de Policía han sido igualmente objetivo de las críticas con consignas “madero, también es tu dinero” o “ellos son los ladrones”. Al tratarse de calles estrechas, una treintena de agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) han seguido la marcha a pie para vigilar a los ‘indignados’ aunque en ningún momento han tenido que intervenir. La marcha, al final de la cual se situaban cuatro lecheras y una ambulancia de manera preventiva, se ha desarrollado sin incidentes reseñables aunque sí se han registrado algún incendio aislado de contenedores.