IAM/N.G.
Un joven de 13 años de Lowa (Estados Unidos) está siendo juzgado por matar a tiros a su madre (Crooks Gretchen) en el mes de marzo. El jurado escucho una llamada del 911 donde Noah Crooks describió como mato a su madre tras llevarse su copia de Call of Duty diciendo “algo se apoderó de mi”El jurado también escucho al joven de 13 años intentando coaccionar a su madre de forma violenta mientras decía:“Me siento como si estuviera loco y no soy yo realmente. Intente violarla pero no pude hacerlo. ¿Quién quería hacer eso con su propia madre?. Mi vida se ha ido por el desagüe ahora”Cuando la policía llego a la escena, el cuerpo de Gretchen Crooks fue encontrado tendido en un sofá con su pijama deshecho y estaba desnudo de la cintura para abajo. Los diputados tomaron el arma homicida, un rifle del calibre 22 que se le dio al niño (por parte de su madre) cuando tenía la edad de 11 años.El abogado de Noah Crokks, no niega que su cliente matara a su madre pero afirma que el niño sufrió un “tumor violento” que básicamente hizo que se volviera loco en el momento de la matanza. En su intervención ante el jurado, la defensa también dijo que un psiquiatra infantil testifico que Crooks sufre un “trastorno explosivo intermitente” – una enfermedad mental que se caracteriza por episodios repetidos de comportamiento impulsivo, agresivo o violento.Tras el tiroteo, el niño envió un mensaje a su padre (William Crooks) diciendo:“Papa soy Noah. He matado a mama accidentalmente, lo lamento. Ven a casa ahora por favor”El padre rechazó el texto pensando que era una broma, descubriendo (20 minutos después) que realmente era cierto por el ayudante del sheriff. Durante su testimonio, el padre dijo que su hijo tuvo (en una ocasión) deseos de matar a su madre pero él no se tomo en serio la amenaza. Seguramente porque no hay antecedentes de violencia doméstica o antecedentes penales relacionados con cada uno de los miembros de la familia.Al parecer, la página de Facebook de la madre muestra su interés por una asociación de armas de Springfield, que vende pistolas y rifles. Los residentes del pueblo rural con 3.622 personas, se han visto sacudidos por el asesinato y es la primera vez que ocurre desde 1898.