La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha anunciado hoy en Córdoba, en el marco de los V Premios Felipe González de Canales, que
“Andalucía se convierte en la primera comunidad autónoma en aprobar la flexibilización de los requisitos para cobrar ayudas de la nueva Política Agraria Común (PAC) 2023/2027”. Se trata, como ha explicado Crespo, “de nuestro compromiso con la búsqueda de soluciones para nuestro sector agrario, muy afectado por los efectos de la sequía y por la disminución de fondos de la PAC con pérdidas de más de 500 millones de euros”.
Crespo ha asegurado que, “independientemente de estas medidas de flexibilización, seguimos demandando una moratoria en la entrada en vigor tanto de la nueva PAC como de los ecoesquemas, además de pedir al Ministerio que el olivar, que es un gran sumidero de CO2, se considere un ecorregimen ‘per se’”.
La consejera ha lamentado que “la nueva Política Agraria Común, lejos de suponer una oportunidad para nuestros agricultores y ganaderos supone un coste adicional en un contexto difícil marcado por las consecuencias de la guerra en Ucrania, con elevados costes de producción y con una sequía estructural”.
La Consejería ya remitió la batería de flexibilizaciones en la jornada de ayer al Ministerio de Agricultura. La secretaria de Agricultura, Ganadería y Alimentación de la Consejería, Consolación Vera, además, ha participado esta mañana en una reunión de la PePAC, donde ha vuelto a poner de manifiesto la aplicación de distintas flexibilizaciones de los ecoesquemas al sector para paliar los efectos de “una PAC dura para Andalucía, con recorte de ayudas y que supone más un coste que un incentivo”, como ha explicado.
En el caso concreto del ganado extensivo, la Consejería ha aprobado la disminución de las cargas ganaderas mínimas necesarias, o lo que es lo mismo, el número mínimo de animales por hectárea para acceder al ecoesquema relativo al pastoreo extensivo y percibir las ayudas.
A ello se suma una disminución del porcentaje de rotación necesaria en cultivos anuales, pasando del 50 al 25 por ciento, por lo que de una campaña a la siguiente solo será prescriptivo el cambio del 25 por ciento del cultivo. Además, la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía también ha decidido posibilitar un máximo permitido de superficie en barbecho del 40 por ciento, estipulado hasta la fecha en un 20 por ciento.
Por otra parte, en cultivos leñosos, Andalucía ha fijado la reducción del requisito de cubiertas vegetales vivas como ecoesquema durante cuatro meses al año a tan solo dos, con motivo de la sequía. Lo exigirá, además, entre el 15 de enero y el 14 de marzo de 2023, retrasando al máximo su entrada en vigor para posibilitar la formación de la cubierta vegetal.
Vera ha destacado que “hemos aprobado también otras flexibilizaciones más específicas de determinadas prácticas, siempre pensando en ayudar a los agricultores y ganaderos andaluces en una nueva PAC que no favorece al campo andaluz”.
Estas medidas, ya comunicadas esta mañana al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, tienen carácter provisional y deberán ser ratificadas en el mes de marzo, conforme a los plazos y requisitos que contengan en el Real Decreto regulador de los ecorregímenes.
Un comentario
Sí, probablemente modificando la ley que legaliza los regantes ilegales de Doñana y deja seco el humedal.
Hasta Europa ha metido mano en el asunto.
No hay agua para los regantes legales, que están desecando el humedal, y legalizan a los ilegales que hacían competencia ilegal a los legales sin pagar tasas y derrochando agua porque nadie los controlaba. En vez de cortarles el riego, los legalizan. Con dos cojones.
Gran gestión del agua la de la Junta. Y Europa multando por eso y nosotros pagando la multa de esos demócratas que solo benefician sus intereses.
Y encima presumen de gestión, es para cortarse las venas solo de oírlos.
Los humedales les importan una mierda, el agua para sus campos de golf y sus explotaciones agrarias con mano de obra inmigrante, que viven en condiciones de miseria y en muchos casos de forma ilegal.
Esos son sus intereses del agua de todos, primero es de los animales y la naturaleza y después de los demás. si no cuando no haya humedal todos lo lamentaran, yo quizás ya no esté, pero el desierto avanza y avanza, veréis que risa da eso.