Con su respaldo, la Cámara de los Comunes dio su aprobación a traspasar a la legislación británica las nuevas fechas establecidas por Bruselas para materializar el Brexit, después de que el Gobierno solicitara un aplazamiento hasta el 30 de junio que fue rechazado.
De este modo, el día inicial previsto para la ruptura entre el Reino Unido y la Unión Europea (UE) del 29 de marzo queda oficialmente descartado.
El texto refrendado por los diputados plantea extender la validez del Artículo 50 del Tratado de Lisboa hasta el 22 de mayo, en virtud del cual se iniciaron el 29 de marzo de 2017 los dos años de negociaciones del Brexit, siempre y cuando el Parlamento suscriba el acuerdo de salida de la primera ministra, Theresa May.
Todo apunta a que el Gobierno planea volver a someter a votación ese documento este viernes, siempre y cuando lo permita el presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, después de que fuera descartado en enero por un margen de 230 votos y en marzo de 149.
Bercow recordó hoy al Gobierno que ese texto solo podrá ser sometido a una tercera votación siempre y cuando incorpore “cambios sustanciales”.
Si los parlamentarios no apoyan el pacto, la legislación a la que dio luz verde hoy la Cámara Baja establece que la fecha de ruptura entre Londres y Bruselas será el 12 de abril.
Los diputados se pronunciarán también este miércoles en una serie de “votos indicativos” sobre ocho posibles alternativas del Brexit, entre las que se incluyen una salida sin acuerdo, una unión aduanera, cancelar la salida de la UE o un referéndum.