Los comerciantes manifestaron su preocupación porque habían notado que las visitas de los clientes se habían reducido por la desaparición del aparcamiento que había en el antiguo río de la Miel -hoy en obras y que en breve se convertirá en un palmeral- y de las zonas adyacentes. Advierten que se echan temblar cada vez que escuchan que una calle se va a renovar porque al final termina con más espacio peatonal y con menos para los vehículos.
La primera gran alternativa que se puso encima de la mesa fue la ampliación de la zona sur de aparcamientos del Llano Amarillo a partir del próximo domingo para incentivar las compras. Además, la concejalía de Movilidad Urbana se comprometió a estudiar la posibilidad de que un microbús llegue hasta el mercado. También se hicieron eco los comerciantes de que algunos usuarios de barriadas como La Granja, La Juliana y Pescadores les dicen que no se pasaban por el Ingeniero Torroja porque las paradas no las tenían demasiado próximas.
Una de las viejas reivindicaciones de este sector es instaurar una zona azul en los alrededores que permita la rotación continua de los coches. Protección Ciudadana recordó que ya está llevando a cabo un estudio sobre su viabilidad.
El Ayuntamiento ofreció de manera provisional un terreno frente al bar Los Cristales para que unos ochenta vehículos puedan estacionar. Los vendedores aceptaron, pero solicitaron celeridad para que estuviera a punto cuanto antes y, sobre todo, para que estuviera abierto para el 15 de diciembre, fecha a partir de la cual son claves sus ventas.
Además, Protección Ciudadana va a habilitar dos zonas de aparcamientos para motos, una cerca del BBVA y otra en la calle Santacana. También trataron la inflexibilidad de la Policía Local en los estacionamientos transitorios por la zona baja. Es otra de las quejas recibidas por los comerciantes de los ciudadanos.
El presidente de la asociación que reúne a los comerciantes del Torroja, Fernando García, agradeció las propuestas municipales, aunque avisó que el colectivo al que representa estará atento a los avances. “Realizaremos un seguimiento”. Agradeció el llamamiento del alcalde a los ciudadanos y que se esté preparando la celebración de un amplio número de actividades destinadas a incentivar el ocio y el consumo en el comercio tradicional del centro.
Los comerciantes, que llevaron también las demandas de la Apymeal y que contaron con el apoyo de la Cámara de Comercio del Campo de Gibraltar, calculan que se han perdido en los últimos tiempos unas 400 plazas de aparcamientos.
