El toro como un icono de la provincia de Cádiz no es nuevo pero con Territorio Toro nace el proyecto para sacarle partido turístico a todas sus manifestaciones, más allá del toro en el campo o en las plazas. El toro de Osborne, las ganaderías de Domecq, Cebada Gago o Núñez del Cuvillo, las plazas de El Puerto y Benaocaz o la fiesta del Toro Embolao tienen fama nacional e internacional, pero como producto turístico aún tiene margen para crecer.
La Diputación Provincial de Cádiz por medio del Patronato de Turismo se ha sumado a “Territorio Toro”, un proyecto en el que participan las diputaciones de Sevilla, Huelva y Jaén y que pretende poner en valor turístico todo lo relacionado con el mundo del toro. No se centra tan sólo en las corridas de toros, sino también en la crianza de este animal tan importante para la cultura y la economía andaluza de forma que se constituya en un atractivo turístico más de cara a los visitantes.
Irene Canca diputada provincial de Turismo destaca que en la provincia de Cádiz ya se había comenzado a trabajar en este sentido: “hace años que habíamos apostado por el toro al ser conscientes de que es una seña de identidad de esta provincia y es un icono que todo turista busca”. Canca señala que ya funcionan iniciativas turísticas basadas en la cultura del toro, como “A Campo Abierto” donde los Domecq muestran cómo vive el toro en la dehesa, cómo nace y cómo se cría el toro bravo.
“Territorio Toro” incluirá visitas a las plazas de toros, a los museos taurinos, a las escuelas y a las ganaderías. Se trata de poner en valor todo el entorno de las dehesas y ofrecerlas como oferta turística. En toda Andalucía hay más de 4.500 hectáreas dedicadas a la cría del toro.
