Las enormes listas de espera y la falta de respuesta del sistema público han dado un nuevo empujón a cientos de miles de personas hacia los seguros privados.
Sin duda la presentación de la ampliación en el mayor hospital comarcal privado, se ha vivido con gran apoyo y colaboración institucional. La CCDSPCG se pregunta si es lícito y ético que los servidores públicos que ocupan puestos tan relevantes como la Delegación Provincial de Salud y Familia, los gerentes de nuestras dos Áreas Sanitarias que deben defender y trabajar por mejorar la Sanidad Pública dediquen su tiempo en participar en actos como la promoción de un centro sanitario privado.
Para la Coordinadora resulta bochornoso e indignante verlos junto a varios alcaldes ocupando su tiempo en promocionar y alardear de su colaboración con centros privados. Entiende que nuestros servidores públicos, pagados con dinero público, deberían estar trabajando para que esa inauguración se hubiese hecho en el Hospital Punta Europa que buena falta le hace y para lo que se les paga.
Es evidente que en el Campo de Gibraltar hay una falta llamativa de camas e infraestructuras sanitarias, de ahí la ampliación, pero que ésta se haga en los centros privados, en lugar de en nuestros hospitales comarcales, es un fracaso del trabajo de los dirigentes de la Administración Sanitaria y de los representantes políticos.
Siguen dejándonos muy claro que la política actual apuesta firmemente por los conciertos con los centros privados para derivar tanto pruebas, consultas e intervenciones quirúrgicas a precios de oro que enriquece a empresas privadas y deja a nuestros centros sin dinero y sin personal.
¿Están nuestros servidores públicos al servicio de los intereses privados?
Las enormes listas de espera y la falta de respuesta del sistema público han dado un nuevo empujón a cientos de miles de personas hacia los seguros privados. Durante la pandemia, los seguros privados han experimentado el mayor crecimiento de los últimos 15 años con casi 500.000 nuevas pólizas, hasta alcanzar 11 millones de personas que ya cuentan con asistencia sanitaria privada, el 23% de la población. Mientras, se estrangulan económicamente los centros de gestión directa de forma que ni los hospitales ni la Atención Primaria están pudiendo dar respuesta a las necesidades de atención de la población.
La única forma de recuperar el sistema sanitario público es blindar la sanidad contra el ánimo de lucro, potenciando la Atención Primaria y la Sanidad Pública. Todo lo demás es seguir contribuyendo al beneficio de grandes corporaciones que negocian con nuestra salud.