El primer secretario de los andalucistas, José Maria España, ha denunciado que La Royal Navy “siga con sus provocaciones y vuelva ahora a hostigar con dos de sus naves a una patrullera de la Guardia Civil”. Asimismo quiso criticar que en esta ocasión las embarcaciones británicas, una patrullera y una lancha semirrígida, “se encontraran en aguas jurisdiccionales españolas”, exactamente a la misma distancia, (seis millas), de La Línea de la Concepción, el punto más meridional de Gibraltar. Es por este motivo que el andalucista ha pedido al Gobierno Español y a la Junta de Andalucia que se “hagan respetar” ante el Gobierno Británico . “De seguir en esta actitud de pasividad por parte del gobierno español y de la Junta de Andalucía, no tenemos la más mínima duda de que cualquier día ocurrirá una desgracia en aguas del Estrecho”, apostilla.
Asimismo, España ha querido explicar que la actitud de las patrulleras británicas es “una provocación en toda regla” porque “incluso estando en aguas españolas, no se arrendaron a las órdenes de la Guardia Civil, sino todo lo contrario, ya que exigieron por megafonía a los españoles que abandonaran la zona e incluso izaron dos gallardetes que significan en lenguaje marítimo ‘se dirige usted hacia un peligro inminente´”. Esta actitud, explicó el andalucista, lo único que favorece es a que se enturbien mas las relaciones con el pueblo gibraltareño. Pedimos al gobierno español que actué con digitad y contundencia, y nos preguntamos que ¿Cómo actuaría el gobierno español si estos incidentes estuvieran produciéndose con un estado mas débil como por ejemplo el estado marroquí?.
De la misma manera, los andalucistas han querido sembrar las claves para que la lucha contra el narcotráfico “no cese”, ya que “esta incongruencia provocada por ambas partes, está delimitando el serio trabajo de la Guardia Civil española”. Según los andalucistas debería de haber una clara delimitación de las aguas, y de este modo no se provocarían más enfrentamientos con el gobierno gibraltareño. A pesar de dicho consenso, los andalucistas creen que el cortar por lo sano la lucha contra el narcotráfico en el límite de aguas españolas y británicas, facilitará a los narcotraficantes una mayor maniobra de movimiento por la cual introducir la droga en el peñón y en la península.