La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Cádiz de Comisiones Obreras (FSSS-CCOO de Cádiz) ha presentado este viernes un análisis detallado de las agresiones sufridas por los profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en el período 2007-2020.
Las agresiones son segregadas a lo largo de esa serie histórica en primer lugar atendiendo a los valores absolutos y frecuencia, naturaleza (física y verbal) de aquellas y categoría profesional. Se completan con un mapa de riesgo de agresiones por centros sanitarios.
Se añaden unas conclusiones y propuestas planteadas por CCOO: aumento de la plantilla de la sanidad pública, la integración de la vigilancia de seguridad en todos los centros y la constitución e impulso de un Observatorio de Agresiones a Sanitarios, el diseño y publicación de una campaña mediática de concienciación ciudadana y la revisión y aclaración de la tipificación de los delitos de atentado y lesiones.
5 noviembre 2021
Un profesional sanitario es agredido cada dos días en la provincia de Cádiz. Dicho de otro modo, uno de cada diez trabajadores de la sanidad pública ha sufrido alguna agresión al menos desde que tenemos registrados datos. Estos son algunos datos que se desprenden del último análisis que ha presentado el secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Cádiz de Comisiones Obreras (FSSS-CCOO de Cádiz), Antonio Aroca, este viernes.
La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Cádiz de Comisiones Obreras (FSSS-CCOO de Cádiz) ha presentado esta mañana a los medios de comunicación un estudio de las agresiones a profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en el período comprendido entre 2007 y 2020 en la provincia de Cádiz. Dicho documento es parte de un análisis más profundo a nivel andaluz llevado a cabo por esa organización sindical.
El estudio, cuyos datos han sido extraídos a través del Registro Informatizado de Agresiones (RIAC) de la Servicio Andaluz de Salud,, analiza la evolución de las agresiones sufridas por los profesionales en la sanidad pública andaluza durante 15 años, tanto en número absoluto de registros como por categoría profesional y tipo de agresión (física o verbal), además pormenoriza los tipos centros sanitarios más conflictivos en el Servicio Andaluz de Salud, todo ello, explica su responsable de Salud Laboral, Alfonso Campos, no solo para denunciar la situación cada vez mas degradante de las condiciones inseguras en la que convivimos los profesionales sanitarios, sino también para demandar el paso de la política de papeles mojados del Gobierno de la Junta de Andalucía hacia una política real y efectiva que elimine esta lacra social.
Los resultados obtenidos por CCOO son alarmantes: más del 10 % de los profesionales sanitarios han sufrido alguna agresión, física o verbal durante su trabajo. Y casi cada dos días, se produce una agresión a una persona trabajadora sanitaria en un centro público.
CCOO advierte que, durante estos casi quince años, el número de agresiones a los profesionales gaditanos se ha triplicado, pasando de las 78 en 2007 a las más de doscientas agresiones en 2019. Respecto a la naturaleza de dichas agresiones: las físicas han aumentado el 50 % en el mismo período estudiado, mientras que las agresiones verbales se han triplicado. La Federación de Sanidad tilda datos alarmantes a razón de la evolución exponencial que están teniendo estos deleznables actos toda vez que no solamente se producen daños a la salud leves sino en ocasiones las consecuencias han sido muy graves y conllevan a la muerte de un profesional.
Por otro lado, atendiendo a las categorías de los profesionales, los sanitarios mas castigados por esta lacra son los médicos (casi la mitad de las agresiones) y el personal de Enfermería principalmente enfermeros y TCAE. Sin embargo, CCOO incide nuevamente que no es asumible por la sociedad ninguna agresión y también otras categorías como celadores o personal administrativo son objetivo de estos agresores.
El estudio, como dijimos, añade datos de los centros más peligrosos para ejercer la labor sanitaria. Concretamente la atención primaria es donde se concentra la mayoría de las acciones violentas, con casi ocho de cada diez agresiones, casi el 80 %, siendo los centros de salud de las comarcas de la Bahía de Cádiz y la Janda dependiente del Distrito Bahía de Cádiz-La Janda los más peligrosos, cuya Dirección, sigue exponiendo el responsable de Salud Laboral, aún con estos alarmantes datos no está integrando la vigilancia de seguridad en todos sus centros como viene reclamando año tras año CCOO y se apruebe definitivamente un plan por fases y se vaya implantando dicha vigilancia comenzando por los centros con mayores índices de violencia hasta la cobertura total de los centros sanitarios.
Por otro lado, con relación a la atención especializada, los hospitales con un mayor número de agresiones son el Puerta del Mar de Cádiz y el hospital de Jerez que conjuntamente aglutinan una tendencia que se acerca peligrosamente al 10 % del total de datos registrados, que expresa CCOO además de la presencia ya extensa de la vigilancia, las causas apunta a que además de educativas son más de una plantilla adecuada de los centros para que las ratios y cupos de cada profesional sea el adecuado que disminuya no solo las listas de espera sino también los tiempos de espera de los pacientes y por tanto dé marcha atrás en primer lugar al despido de 8000 trabajadores lo cual ahondará más la crispación social por la saturación de los profesionales y prevén el aumento de agresiones.
CCOO resalta que desgraciadamente las mujeres sanitarias son dobles víctimas de las agresiones, pues reciben un tratos vejatorios principalmente verbales por su género, y para lo cual la organización sindical demanda que una respuesta contundente por parte de la Junta de Andalucía con la integración efectiva de políticas activa contra las agresiones a los profesionales sanitarios que profundicen en políticas contra la violencia por razón de género a tenor de las cifras alarmantes del número de agresiones de las mujeres por su condición como tal.
Ante estos datos, la responsable de Negociación de CCOO, Sonia Alcedo denuncia el fracaso notorio del plan de prevención de agresiones con estos datos objetivos estudiados solamente han servido a la Junta de Andalucía ha generar una nueva y estupenda base de datos sin que posteriormente se haya plasmado unas mejoras en las condiciones de los profesionales sanitarios. Así, CCOO demanda de la Junta de Andalucía una política real, proactivas y efectivas en esta materia que ponga fin a esta lacra social y laboral.
Entre las medidas propuestas por CCOO, se encuentra un plan de choque urgente que ataje la escalada de violencia que sufren los profesionales de la sanidad y plantea a la Junta de Andalucía el fin de las políticas de recortes de contratación tras la pandemia no despida a 8000 trabajadores del sistema sanitario público pues un menor número de profesionales conlleva a mas tiempo de espera por parte de los pacientes y por tanto una mayor posibilidad de crispación y situaciones de violencia sobre todo en las urgencias tanto hospitalarias como en los centros de salud como en las consultas médicas.
CCOO exige igualmente un cambio legislativo que aumente las penas y multas a los agresores del delito de atentado y del delito de lesiones, si concurrieren y jurídicamente se aclare mas si cabe, su prueba y sanción.
Atendiendo a medidas activas, CCOO incide nuevamente en la integración en todos los centros de salud y urgencias hospitalarias de la vigilancia de seguridad durante las 24 horas del día que bien sea disuasoria o reactiva contra las agresiones a los profesionales. La responsable de Negociación, Sonia Martín añade que no entiende como otros organismos públicos con menos índices de agresiones tienen en su horario laboral de apertura al público, este tipo de vigilancia.
CCOO no ve menos importante que la Junta de Andalucía ponga en marcha con carácter inmediato una campaña de concienciación a la ciudadanía del servicio público que prestamos el sistema sanitario público andaluz y el respeto a nuestra labor diaria.
Por último, esta organización sindical quisiera que de una vez se ponga en marcha un observatorio de agresiones a profesionales sanitarios que concurran todos los agentes implicados como administraciones públicas, colegios profesionales, organizaciones sindicales, asociaciones de consumidores y usuarios, organismos y técnicos de prevención de riesgos laborales y las fuerzas de seguridad entre otros, empoderando la figura del mediador e impulsando estudios epidemiológicos y la publicación de un mapa de riesgos como principales objetivos.