En concreto, el grupo francés ya ha puesto en marcha esta medida, que aún está “en pruebas”, en dos centros de la Comunidad de Madrid -Hortaleza, en la capital, y en San Sebastián de los Reyes-.En estos dos hipermecados, hay alrededor de 200 productos de alimentación y droguería en los que se puede ver esta comparativa, que, por el momento, se realiza con los precios de Mercadona. En los carteles, el grupo ha colocado también la fecha en que se recogieron los precios, ya que éstos pueden fluctuar. Carrefour se ampara en el derecho a la publicidad comparativa, una práctica que “ya es muy común en Estados y Francia”, según remarcan fuentes de la empresa, aunque no tanto en España. Según la ley, la publicidad comparativa es legal siempre que se haga con datos objetivos -como los precios- y no se utilicen datos engañosos y falsos. Los productos tienen que ser además equiparables. En este caso, Carrefour compara los precios tanto de marca propia como de marcas de distribuidores. Fuentes de la empresa han afirmado que aún no ha tomado una decisión definitiva sobre la medida, por lo que no han confirmado si se extenderá a todos sus centros en España.