El primer documento técnico publicado al respecto por Gibraltar establece que el régimen jurídico que seguirá aplicándose en la frontera es el Código de Fronteras de Schengen. La principal diferencia será que los ciudadanos del Reino Unido, incluidos los gibraltareños, se convertirán en ciudadanos de terceros países para la UE y, por lo tanto, estarán sujetos a un régimen de control diferente.
Gibraltar ha asegurado que seguirá trabajando para llegar a un acuerdo y empleará su mayor esfuerzo y “toda la buena voluntad política del mundo”. Sin embargo, aclaran que “si no es posible llegar a un acuerdo, habrá consecuencias para la movilidad de las personas a través de la frontera”.
Entre esas posibles consecuencias para los gibraltareños, en su calidad de nacionales de terceros países para la UE, sin perjuicio de los acuerdos para mitigarlas, figuran:
a) el sellado de los pasaportes al entrar o salir del Espacio Schengen;
b) el escaneado de documentos con arreglo al Sistema de Información de Schengen (SIS);
c) un límite de estancia en el Espacio Schengen de 90 días en cualquier período de 180 días;
d) la posibilidad de interrogar a los nacionales de terceros países sobre el motivo de su entrada en Schengen;
e) la posibilidad de interrogar a los nacionales de terceros países sobre las condiciones de su estancia prevista en Schengen;
f) la posibilidad de comprobar que los nacionales de terceros países disponen de medios de subsistencia durante su estancia en Schengen;
g) la aplicación, a partir de 2022, del sistema de autorización previa de viaje ETIAS (similar al ESTA de los Estados Unidos).
Gibraltar asegura que estatus quo actual “no es una opción” y considera que es importante que la opinión pública y cada uno de los ciudadanos a título individual comprendan estas posibles consecuencias y cambios y empiecen a planificar en consecuencia sus propios asuntos personales si incluyen la necesidad de desplazamiento transfronterizo.
“Las opciones actuales son o bien un acuerdo sobre la movilidad a través de la frontera o bien ningún acuerdo, con las consecuencias que se derivan, como se ha descrito anteriormente”, señala el Ejecutivo gibraltareño, por lo que, para evitar las consecuencias de la falta de acuerdo, sigue estudiando diferentes tipos de asociación entre Gibraltar y el Espacio Schengen que permitan una mayor fluidez del paso por la frontera de las personas a partir del próximo año.