El primero de los proyectos, presentado por la compañía Mitra Alfa, consiste en un parque fotovoltaico de 100 megavatios en la zona de La Herradura, en Castellar.
El alcalde castellarense, Adrián Vaca, ha trasladado la preocupación existente entre los propietarios de las más de cuarenta explotaciones agrícolas afectadas por el trazado dispuesto para esta instalación energética, para la que se solicita en estos días la categoría de bien de utilidad pública. El primer edil ha avanzado en un comunicado que propondrá un trazado alternativo.
En los mismos términos se ha expresado Verdemar, que ha rechazado el proyecto de planta solar fotovoltaica FV Sancho, de 200 megavatios, al considerar que afecta a la funcionalidad de colchón forestal entre el Parque Natural de Los Alcornocales (Pinar del Rey, El Chapatal o La Alcaidesa) y los municipios de San Roque y Castellar.
Para los ecologistas, el proyecto supone “una expansión solar indiscriminada y de consumo innecesario de recursos naturales y de suelo”, además de causar “una transformación no retornable del paisaje” y “la transformación del valle, de uso agroganadero”.
Por su parte, el Ayuntamiento de Jimena de la Frontera ha emitido un informe en contra del proyecto de Abengoa para la construcción de una planta fotovoltaica de 200 hectáreas en Cerro Carretero.
El Consistorio considera que el proyecto provocaría “un gran impacto visual y medioambiental para el municipio, que además supone un riesgo por posibles afecciones arqueológicas”.