Verdemar recuerda que el principal uso de los neumáticos que se desechan es el de servir como combustible en fábricas de cemento, además de otros muchos usos posibles alrededor del reciclaje y reutilización (recauchutado, uso en firmes de carreteras, etc.).
Por ello, lamentan que se depositen en el entorno natural como residuos, ya que permiten la acumulación en su interior de agua de lluvia y son reservorio de larvas e insectos que pueden propagar enfermedades y afectar la salud pública (el dengue y la fiebre amarilla en los países tropicales, y el virus del chikungunya).