La convocatoria de esta huelga sale adelante tras cerrarse sin acuerdo hoy la última reunión de las partes en el Sercla, han informado fuentes de UGT en Veiasa, sindicato que convoca los paros parciales de dos horas en el turno de mañana y otras dos en el de tarde que arrancarán el 29 de enero.
La UGT reclama que se activen las contrataciones en Veiasa porque hay un déficit estructural de plantilla de unas 140 personas desde hace ocho años en los que se empezaron a abrir estaciones de ITV pero la ley de presupuestos de 2012 impidió hacer contratos fijos.
Actualmente, trabajan en las setenta ITV que gestiona Veiasa en Andalucía más de 1.300 personas de plantilla fija y más de 600 eventuales, algunos de los cuales llevan más de diez años.
Por estos motivos, la UGT ha pedido a la Consejería de Hacienda que desbloqueo las autorizaciones para hacer contrataciones, algo que se logró a finales de 2019 con contratos temporales y que permitió agilizar el servicio que prestan las ITV pero ha comenzado 2020 con el mismo problema, ya que al no haberse autorizado los contratos, se están produciendo retrasos en casi todas las estaciones y “en algunos casos desordenes público”, ha alertado.
En las ITV de Algeciras el retraso en la cita para pasar la inspección de vehículos es de setenta días y la media en Andalucía es de unos treinta días.
Otro motivo de la huelga es la “usurpación de la negociación colectiva” por parte de la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Pública, ya que un preacuerdo de convenio firmado por los trabajadores y la dirección de la empresa ha sido modificado unilateralmente por parte de la Función Pública dependiente de ese departamento.
Asimismo, la UGT ha solicitado al Gobierno andaluz una “declaración contundente de que no va a privatizar el servicio de ITV” porque, según este sindicato, tiene una gran calidad reconocida por organismos internacionales y, además, es una empresa que da entre quince y veinte millones de beneficios anuales.
No obstante, las citadas fuentes sospechan que se puede estar dejando que se deteriore el servicio de las ITV para justificar su privatización.