El grupo ecologista informa de que multitud de vecinos y vecinas de las poblaciones afectadas por la nube tóxica les han contactado para saber qué hacer, ante la desinformación de las autoridades.
Verdemar, grupo ecologista miembro de la federación estatal Ecologistas en Acción, ha estado desde el minuto uno siguiendo la evolución del incendio ocurrido hoy martes en la planta química de Indorama en Guadarranque (San Roque). Una empresa que, según reza en la propia web de la Asociación de Grandes Industrias del Campo de Gibraltar (AGI) trabaja en esta fábrica con componentes químicos tales como el ácido tereftálico purificado (PTA), polímero de tereftalato de polietileno (PET), ácido isoftálico purificado (PIA), y de hecho la instalación que ha sufrido el fuego es “una de las pocas en el mundo capaz de producir PTA, PIA y PET en las mismas instalaciones”.
Es por ello que para el grupo ecologista resulta incomprensible que desde las autoridades locales de las ciudades más afectadas por la nube tóxica, es decir, los Ayuntamientos de San Roque, Los Barrios, Algeciras y La Línea se haya trasladado el mensaje contradictorio y falso a la ciudadanía de que los humos no eran tóxicos, y a la vez, se pidiera permanecer en casa y cerrar puertas y ventanas. Maxime cuando a Verdemar le consta que sí se han evacuado al resto de industrias circundantes y que personas conocedoras del polígono se han marchado. Una actitud de quienes deben velar por la seguridad y la salud públicas que, por contra, que pone en grave riesgo de contaminación a la población del Campo de Gibraltar. No más razonable ha sido la gestión desde la Junta de Andalucía. Durante el incidente, la red de vigilancia ambiental situaba sus medidores de calidad ambiental en verde, que es lo mismo que decir que el aire era sano. Una prueba manifiesta de que el sistema no funciona, en especial cuando no se da una medición del aire en tiempo real.
Por estas graves deficiencias, Verdemar continuará reclamando un plan de autoprotección para el Campo de Gibraltar que de certidumbre y tranquilidad a la ciudadanía ante incidentes como este, y que dote a la comarca de una voz oficial coordinada que recomiende a los vecinos lo que tienen que hacer en una situación tan crítica como ésta, para que estos no se vean obligados a informarse a través de redes sociales e incluso llamando a los ecologistas.
Verdemar recuerda que este incendio se produce mientras dos proyectos de ampliación del polígono industrial se encuentran en exposición pública, autorizados por los ayuntamientos de San Roque y Los Barrios. A este respecto, recientemente el consejero del gobierno andaluz Juan Bravo declaraba en visita al Campo de Gibraltar que “debemos ser capaces de simplificar trabas administrativas y burocráticas, en esta zona es el claro ejemplo CEPSA, que tiene paralizada una inversión de mil millones de euros por una traba administrativa muy grande”. Esa traba administrativa a la que se refería el consejero es la declaración de impacto ambiental, un requisito obligatorio por ley. Unas declaraciones preocupantes para la ciudadanía del Campo de Gibraltar porque evidencian que para las autoridades locales y autonómica las leyes pasan a ser molestas cuando se trata de los intereses de las grandes industrias que operan en la comarca. Prueba para Verdemar de que la Junta de Andalucía y los alcaldes del Campo de Gibraltar se han puesto una vez más al servicio de los intereses empresariales de las grandes industrias de la comarca y no de toda la ciudadanía, y que demuestran de lo urgente de declarar una moratoria industrial en el territorio.
En próximas fechas el grupo ecologista valorará movilizar a la ciudadanía para que lo ocurrido hoy sirve como punto de inflexión respecto a los riesgos que asumen los campogibraltareños/as por el polo químico de la bahía. Y para que se ponga en marcha, lo antes posible, una revisión y actualización del plan de emergencia teniendo en cuenta a los vecinos y vecinas, además de tomar medidas de actuación y coordinación urgentes para mantener a los campogibraltareños adecuadamente informados ante eventualidades de tan extrema gravedad.